De baile popular a llamado de auxilio en Oaxaca: 400 contagios y 12 muertos, por brote de Covid

Oaxaca de Juárez.–  Pasaron  sólo 20 días para que la celebración se transformara en emergencia en  San Juan del Río, una comunidad perteneciente al municipio de Santiago Choápam, en la zona norte de Oaxaca. En este pequeño pueblo de mil 200 habitantes, un baile popular, que se realizó el 5 de enero, se convirtió en el detonante de un brote de Covid-19 que ha dejado12 personas fallecidas, 14 hospitalizadas y un estimado 400 contagios, según las autoridades municipales. 

En esos días, el poblado decidió relajar las medidas preventivas contra el virus, levantó su filtro sanitario y festejó al Divino Niño Jesús, al ritmo de la música tropical de la banda Costa Brava de Veracruz. Lo hizo en comunidad, como antes de que la pandemia cambiara su vida de celebración, con cientos de personas, sin cubrebocas, ni sana distancia, como lo muestran fotografías de aquella festividad religiosa. En los siguientes días, la alegría se convirtió en un llamado de auxilio. 

Los primeros indicios de que esta localidad de la Cuenca del Papalopan enfrentaba un brote de coronavirus  se dio luego de la aplicación de pruebas rápidas a 30 personas, en las cuales 10 resultaron positivas al Covid-19, incluido el personal médico del centro de salud que tuvo que aislarse. Lo que siguió, fue miedo, pero no resignación. 

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De acuerdo con el oficio 39/2021, dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador Alejandro Murat,  fue el pasado 28 de enero cuando Evergisto Gamboa Díaz, el edil de Choápam, advirtió que su comunidad enfrentaba este brote sin personal médico ni medicinas, y que la población se encontraba encerrada en sus casas, por lo que comenzaban a escasear los alimentos. 

Ante ello, pedía mil vacunas, personal médico, tanques de oxígeno, cubrebocas, sanitizante, gel, equipo de protección, brigadas para tomar muestras y sanitizar, y víveres. La solicitud estuvo acompañada de una advertencia. 

“Ante el olvido, la pobreza y el desprecio, nos da lo mismo morirnos acá en la ciudad, que en la montaña, por tal razón, de no dar respuesta inmediata a esta petición, todos los que dieron positivo y están asilados, nos trasladaremos al centro de la capital, para morirnos en nuestro abandono en Oaxaca (ciudad)”. 

De acuerdo con los Servicios de Salud de Oaxaca, la solicitud de ayuda fue atendida casi de forma paralela y ha sido movilizada una brigada de respuesta rápida conformada por cinco elementos, incluidos dos médicos y dos enfermeras. 

También se entregaron 40 litros de cloro, cubrebocas KN95, batas desechables y dos galones de alcohol en gel; además, hasta el momento se ha confirmado el diagnóstico de Covid-19 en 12 pacientes: tres hospitalizados y el resto se atiende de manera ambulatoria. 

Juan Carlos Marquez Heine, secretario de Salud estatal, explica que lo que sucedió en Choápam, es resultado de las fiestas de fin de año y Reyes, que saturaron el sistema de salud estatal, que pasó de tener 280 personas hospitalizadas al día, a mediados de diciembre, a 450 a fines de enero. 

Todo esto complicado aún más por la insistencia de las comunidades de realizar fiestas patronales, aumentando niveles de estrés y contagio, que desatan un efecto de cadena. 

“Nos está costando trabajo controlarlo, en vez de planear cómo salir,  tenemos que estar ubicando cuáles comunidades están haciendo fiestas para prepararnos y que dentro de 15 días se refuerce el trabajo de unidades médicas, como la toma de muestras”, dice en entrevista con EL UNIVERSAL.  

Señala que el desconocimiento es lo que genera el pánico como el de esta comunidad,  por lo que en la dependencia se ha optado por adelantarse y señalar directamente a las comunidades en las que se acercan nuevas festividades, para exhortarlas a que no se realicen. 

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En el caso de San Juan del Río, explica que la emergencia se atendió desde los primeros días, a través de un protocolo de atención inmediata, que consistió en un cerco sanitario y brigadas médicas que en Oaxaca recorren las comunidades desde hace medio año, bajo el nombre de “Te quiero con salud”, cuando la entidad vivió lo que hasta entonces se consideraba el pico de contagios en el Istmo y la Cuenca. 

El funcionario asegura que no se descarta tomar medidas legales en contra de quienes permitieron el baile popular, pero señala que corresponde a las instancias de procuración de justicia. “Nosotros generamos las observaciones, el reporte es que el brote fue secundario, que se asocia a este evento”, pero agrega que se está trabajando con las autoridades de Choápam y ya no existe el riesgo de un plantón en la capital. 

Lo anterior pese a que el edil segura que han tenido que comprar insumos como tanques de oxigeno con recursos propios, que la ayuda no ha llegado y que no han desistido de la amenaza. 

“Lo voy a cumplir, si no me atiende el gobierno, lo voy a hacer, sé que es un delito, y lo asumo, lo voy a responder, pero prefiero estar en la cárcel que ver a mis paisanos morir”, advierte el presidente municipal donde la fiesta se convirtió en muerte.