Carlos Ibáñez, el guardián del tiempo que por 43 años ha vigilado el reloj de Tlaxiaco, emblema de Oaxaca
Su familia ha cuidado por generaciones este reloj que fue nombrado Patrimonio Cultural del Estado y es uno los principales atractivos turísticos de esta ciudad de la Mixteca; su maquinaria cumplirá 71 años este 2023
Tlaxiaco.- Desde hace 43 años, Carlos Ibáñez Santiago es el relojero de Tlaxiaco. Su trabajo es cuidar que el histórico reloj ubicado en el centro de esta ciudad de la Mixteca de Oaxaca no se detenga; también es responsable del mantenimiento y reparación de las piezas dañadas de cobre, acero y fierro.
El pedestal fue construido el 22 de junio de 1947, con la cooperación de los tlaxiaqueños, mientras que el reloj fue donado por Francisco Cué (abuelo del exgobernador Gabino Cué Monteagudo) y su esposa Sara Bolaños de Cué.
La máquina del reloj que cumplirá 71 años este 2023 fue construida en Zacatlán de las Manzanas, Puebla, y en octubre de 2021 fue declarado patrimonio cultural del estado de Oaxaca, pues forma parte del centro y la Plaza de la Constitución de Tlaxiaco.
Foto: Edwin Hernández
Su máquina funciona con tres cuerdas que marcan las horas, los cuartos y los medios que funcionan como contrapeso, lo cual hace mover cada uno de los engranes.
Oficio familiar
Carlos Ibáñez empezó a los 12 años con la relojería.
Su padre, Arnulfo Ibáñez Carrizosa lo ponía a lavar los relojes despertadores de cuerda y también lo acompañaba a dar mantenimiento y cuerda al emblemático reloj de Tlaxiaco.
Foto: Edwin Hernández
“A mi papá también le encargaron el reloj mucho tiempo y nosotros, chiquillos, lo acompañábamos”, cuenta.
Su abuelo Aniceto Ibáñez Robledo y su padre, le enseñaron el oficio de la relojería y su negocio, que tiene más de 100 años y aún pervive en el centro de la ciudad.
Durante su juventud se fue a la Ciudad de México a estudiar en el Instituto Politécnico la licenciatura en Educación.
Posteriormente regresa en la década de los 90 a Tlaxiaco y estudia la licenciatura en Docencia, y fue maestro de educación secundaria donde impartía también el taller de máquinas y herramientas.
Tras la muerte de su padre, se le encarga también el cuidado del reloj que marca el tiempo y anuncia los cuartos de hora y horas en Tlaxiaco.
Foto: Edwin Hernández
Actualmente Carlos Ibáñez tiene 67 años como relojero y 43 como responsable del cuidado del pedestal y reloj ubicado en la Plaza de la Constitución de Tlaxiaco, uno de los principales signos distintivos de la ciudad, así como atractivo turístico.
En estos años, recuerda, sólo en tres ocasiones el reloj se ha detenido y las tres a causa de los sismos. La primera vez ocurrió en el año 1985, la segunda en 1997 y el tercero con el sismo de febrero de 2017, con epicentro en Santiago Jamiltepec.
Foto: Edwin Hernández