Opinión

Conforme nos acercamos a las elecciones del próximo 6 de junio arrecian los ataques entre contendientes y las declinaciones (¿oportunismo o voto útil?) de candidatos de ciertos partidos a favor de los de otros. Pero vayamos por partes y empecemos con documentos enviados a este espacio que acusan al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, y al presidente municipal con licencia de Zapopan y candidato por Movimiento Ciudadano (MC) a la de Guadalajara, Pablo Lemus Navarro, de encabezar una red de corrupción.

Cabe aquí este contexto: Lemus acusó en días pasados a su contrincante por Morena, Carlos Lomelí, excandidato de ese partido al gobierno del estado derrotado por Alfaro, de la supuesta compra de facturas falsas por 338 millones de pesos para su empresa Lomedic que –según el candidato emecista– es investigada por el SAT. El golpe fue severo, sobre todo por el pasado muy poco transparente de Lomelí denunciado aquí desde el 11 de noviembre de 2018 en la columna titulada “Los malos pasos del hombre de AMLO en Jalisco” (https://bit.ly/2QWEGjo).

Lomelí, Morena y su delegada en Jalisco, Yeidckol Polevnsky no tardaron en responder denunciando la presunta trama de corrupción de Alfaro y Lemus. La trama –señalan– inicia cuando el hoy gobernador era presidente municipal de Guadalajara y entregó en 2016 un espacio en Plaza Tapatía a Grupo Darmar, empresa que había sido liquidada once años antes (2005), incurriendo así en el delito de uso indebido de atribuciones y facultades como servidor público. (Ver documentos 1 y 2).

Habría empezado así una práctica que Lemus replicó en un primer periodo como munícipe de Zapopan y que coincidió con la gestión de Alfaro en Guadalajara. Lemus se reeligió para un segundo período y –según la denuncia de marras– continuó cometiendo ilegalidades.

Así, como alcalde de Zapopan, Lemus otorgó a empresas de su Jefe de Gabinete, Juan José Frangie, diez contratos por un monto de más de 36 millones de pesos para la renta de equipo de copiado “Distribuidora Tecno Office” de la que había declarado no ser accionista, aunque después se corroboró que sí lo era.

Además, Lemus otorgó un contrato de 812 mil pesos a la empresa “Tecnologías para el Espectáculo S.A.”  en la que ocultó ser socio, pero que documentos del Registro Público de Comercio de Jalisco lo desmienten. (Ver documento 3).

El candidato de MC a la presidencia municipal de Guadalajara también expidió en 2018 diez licencias de construcción para el desarrollo “Rinconada del Bosque”, validando una que había sido declarada nula en 2004 porque se tramitó con documentos falsos y la firma de Pedro Castañeda Landeros, una persona fallecida 17 años antes. (Ver documento 4).

De acuerdo con documentos del SAT, Lemus tiene un adeudo con el fisco de poco más de ocho millones de pesos, lo que él desconoce, aunque el portal del Poder Judicial Federal demuestra que conocía del asunto al menos desde 2017, fecha en que presentó un juicio de amparo y diversos recursos legales. (Ver documento 5).

Pablo Lemus ha criticado lo que llamó el uso faccioso de información del SAT y dijo que está bajo un ataque del gobierno federal con el que se pretende evitar su triunfo electoral. El gobernador Alfaro aún no ha dicho nada.

Instantáneas:

1. DECLINACIONES. La más reciente sacó chispas entre las filas del PRI y rayos y centellas entre las del PAN y el PRD. Fue en Baja California, donde la dirigencia estatal tricolor, con el aval de su militancia, retiró su apoyo a la candidata aliancista Lupita Jones para sumarse a la campaña del candidato del PES, Jorge Hank Rhon. El anuncio lo hizo ayer el dirigente estatal priista, Carlos Jiménez, con el argumento de que Jones no levantó y con la petición expresa al CEN del PRI de poner coto a las imposiciones. El líder nacional priista, “Alito” Moreno no avaló la declinación –a la que calificó de traición– y reiteró su apoyo a la candidatura aliancista de la ex Miss Universo. Lo cierto es que las bases priistas bajacalifornianas lograron lo que deseaban desde el inicio del proceso electoral: que Hank Rohn, priista histórico y arraigo de décadas en la entidad, fuera su candidato a la gubernatura del estado. Lo que allá conocen como el “efecto Hank”, ha sido una respuesta contundente al buen golpe que había dado la candidata de Morena, Marina del Pilar Ávila Olmeda, al conseguir para su causa la declinación del candidato de Fuerza por México, Jorge Ojeda.

2. OTRAS DECLINACIONES: la de la candidata del PRI, Graciela Ortiz por la del PAN, Maru Campos, en Chihuahua; la del candidato del MC, Ricardo Bours por el aliancista Ernesto Gándara, en Sonora; la del candidato del Verde, Tomás Saucedo por el de Morena, Rubén Rocha, en Sinaloa; la del candidato de RSP, Abraham Sánchez Martínez por el de Morena, Alfredo Ramírez Bedolla, en Michoacán; la de la candidata del PES, Liliana Becerril por la aliancista Anabel Ávalos Zempoalteca; y la candidata, también del PES, Cynthia Barrios por el candidato de Morena Carlos Castillo, en la alcaldía Coyoacán de la CDMX.

3. DENUNCIA. Recibió este espacio un comentario de la casa de campaña del candidato del PAN a la alcaldía Benito Juárez, Santiago Taboada, sobre algo de lo escrito aquí en la entrega pasada. Dijimos que era una sorpresa el nivel de competitividad que había alcanzado en la demarcación la aspirante de Morena, Paula Soto, y referimos que la empresa demoscópica Votia, le daba 37.4% de la intención del voto contra 41.3% del panista. Nos dijeron que la ventaja que mantiene Taboada, según una batería de encuestas a su disposición es de dos dígitos: algunas con diferencia de 15 puntos y otras hasta de 20. Nos compartieron para probarlo la encuesta de Polls.Mx que da al PAN 45.9% y a Morena 32.3%. En medio de esto, la morenista Soto denunció ante las fiscalías General y de la Ciudad de México a Taboada, a quien acusa de realizar durante la madrugada de ayer llamadas telefónicas de promoción de su candidatura, cuando ella ni su equipo las hicieron. Dijo Soto que es una guerra sucia en su contra que muestra la desesperación panista porque la elección se encuentra empatada y ven un riesgo real de perder por primera vez en 21 años.

4. RUEDAN CABEZAS. El miércoles pasado, en la mañanera de AMLO, un periodista de Campeche le hizo saber de las versiones periodísticas que acusaban a un alto funcionario del IMSS de haber utilizado su puesto para obtener, fuera de tiempo, la vacuna contra la Covid19. López Obrador instruyó al director de IMSS, Zoé Robledo, para que investigara el asunto y resultó que ya estaba abierto un procedimiento en la Función Pública. El caso es que Robledo, quien asistió a la mañanera de ayer sobre medicamentos, le llevó dos cabezas: la de Carlos Enrique García Romero, coordinador nacional de Abasto del IMSS, y su secretario particular Yonel Águila Flores. Los dos se fueron a vacunar al Hospital General de Zona número 8 de la ciudad de México. Ayer quedaron cesados.
 

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