Más Información
“No tomo medicamentos, pero siento que es de mala fe esta acción que hicieron porque saben el ritmo de trabajo que tenemos. Yo no vengo aquí de mala fe, como lo hacen los que están aquí. Realmente, siempre buscan a ver de dónde sacan para el taco”, explicó la diputada tras el incidente.
“Y estamos muy cansados. Sí, efectivamente sentí que se me bajó la presión, me sentí mal. Pero ahí andaba yo en varios ajetreos. Me senté un ratito a contestar un mensaje y sentí como que me echaron agua caliente. No he ido (al médico), yo estaba para ir a una reunión de educación y en ese momento sentí como que cargué los guantes. Pero no, no es nada grave... Yo me levanté a las 3:00 de la mañana para venir para acá, prácticamente no dormimos ayer”, dijo.
Tras el incidente, medios de comunicación difundieron que la oaxaqueña no ha presentado iniciativas desde hace dos meses.
