“Se debe indagar el deficiente manejo de osamenta” en Fiscalía

Experto reprueba el mal trato de elementos de prueba por parte de la Fiscalía del estado

Foto: Cortesía
Seguridad 21/10/2019 06:21 Fernando Miranda Ciudad de México Actualizada 17:03

El hallazgo de una osamenta humana, marihuana y prendas de ropa “secándose” al sol en la azotea de un edificio de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI)  revelan un manejo inadecuado de elementos  periciales y se debe fincar responsabilidades al personal responsable, considera el doctor Martín Barón, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe).

El hallazgo en esta dependencia, adscrita a la Vicefiscalía Regional del Istmo, ocurrió el sábado 12 de octubre, cuando unos 200 pobladores de San Blas Atempa ingresaron de manera violenta a las instalaciones como parte de la búsqueda de Hilary, una jovencita que en ese momento estaba desaparecida y luego fue hallada.

A través de un video publicado en redes sociales se mostró la marihuana; una bolsa con los huesos expuestos, entre los que destaca un cráneo, y las prendas de vestir tiradas de forma desordenada en el techo entre cables y sin ningún tipo de protección o embalaje.

La Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) confirmó la autenticidad del hallazgo en sus instalaciones regionales  y aseguró que eran  elementos de prueba que forman parte de investigaciones en curso que estaban “secándose” en el techo de ese edificio.

“Los restos óseos dieron inicio a la carpeta de investigación 28322/FIST/TEHUNTEPEC/2019, los cuales se encontraban en proceso de envío al Servicio Médico Forense (Semefo) Dr. Luis Mendoza Canseco, del Instituto de Servicios Periciales (...) para los estudios multidisciplinarios correspondientes y su posterior resguardo”, explicó la instancia.

Aseguró que por  las “condiciones climatológicas de calor y humedad”, el personal pericial decidió “sólo dos horas antes” trasladarlos a la azotea del edificio con la finalidad de ser sometidos a “un proceso de secado controlado en sombra y aire circundante”.

Al respecto, el especialista en criminología reprueba el trato dado a dichos elementos de prueba y señala  que es “absurdo” e “inconcebible” que una dependencia que indaga crímenes  asegure que la osamenta y la marihuana se estaban “secando al sol”.

“Es inconcebible, violenta los elementales principios de la criminalística, es lo peor que puede suceder. Así no se investiga”.

Para el doctor Barón, la gravedad de esta situación radica en que los restos humanos podrían  pertenecen a una persona que fue víctima de homicidio, por lo que  debería ser prioritario determinar su  identidad, mediante técnicas de antropología física.

El   experto en Ciencias Penales y Política Criminal dice que este descubrimiento no sólo indica ignorancia o falta de conocimiento de parte de los peritos en el manejo de elementos de prueba, sino también  una falta de sensibilidad, pues “se trata de una persona, de un ser humano”, e incluso señala que se deben fincar responsabilidades al personal.

Sobre la advertencia que hizo la fiscalía respecto que los pobladores contaminaron los indicios y que se procederá conforme a la ley contra quienes resulten responsables por “violar la cadena de custodia”, Martín Barón asegura que desde el minuto uno que el  personal los dejó a la intemperie.

“Desde un minuto que lo  alteres, ya se perdió. Aunque fueron dos horas, los indicios se van perdiendo. Nada de lo que hizo la fiscalía es salvable”.

Consultada por EL UNIVERSAL, la fiscalía asegura que no descarta investigar al personal que decidió exponer los restos, pero no dio  más información

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