Mujeres de 15 a 17 años, las que más desaparecen
Hasta inicios de diciembre de 2019 sumaron 364 las personas “no localizadas” y de éstas 197 son mujeres. De esa suma 348 fueron encontradas, 188 de sexo femenino
Desde el 25 de diciembre de 2018, Martha Rosa Sánchez Concha, una estudiante de la Universidad LaSalle y su madre, María Concha Rebollar, están desaparecidas y no existen pistas sobre su paradero.
Como en el caso de ellas, cientos de imágenes de mujeres circulan a diario en Oaxaca: la mayoría de las veces se trata de jóvenes, adolescentes e incluso niñas.
Hasta inicios de diciembre de 2019 fueron un total de 364 las personas “no localizadas” y de éstas 197 son mujeres, reconoce Jairo García, encargado de la Unidad de Búsqueda de Personas no Localizadas, dependiente de la Fiscalía General del Estado (FGEO).
No obstante, el funcionario asegura que, tras labores de búsqueda, las autoridades lograron localizar a 348 personas de las 364 de las cuales se desconocía su paradero; 188 de sexo femenino.
Martha y María Rosa no se contabilizan entre las personas localizadas. Ellas forman parte del saldo de nueve mujeres que continúan desaparecidas, razón por la cual la comunidad universitaria, organizaciones sociales y usuarios de redes sociales han exigido a las autoridades mayor efectividad en las labores de búsqueda.
De ellas sólo se sabe que se encontraban en su domicilio en San Antonio de la Cal. Tras notar su ausencia, las autoridades iniciaron una investigación por la no localización de ambas mujeres.
Al respecto, Jairo García precisa que, en términos legales, la Ley en Materia de Desaparición Forzada de Personas y Cometida por Particulares establece en su artículo 4 que una persona se considere como desaparecida, implica la probable comisión de un delito, como el que un grupo armado la saque de su domicilio. Estos elementos constitutivos dan pie al inicio de una investigación por desaparición.
En el caso de la “no localización”, la misma ley establece que no hay elementos constitutivos de un delito en el momento de la denuncia. No obstante, cuando se realizan las indagaciones, el hecho puede variar y convertirse en una desaparición, por ejemplo, si tras la denuncia existe una llamada para pedir rescate, se obtienen videos o testimonios que puedan acreditar una desaparición.
El funcionario indica que los cambios de “no localización” a “desaparición” pueden ser inmediatos, si los datos que se obtengan de las primeras investigaciones alcanzan para configurar un delito.
Cifras al alza.
De acuerdo con una investigación de EL UNIVERSAL, cifras de la Secretaría de Gobernación (Segob) indican que la desaparición de personas se ha agudizado desde 2006, cuando arrancó la denominada “guerra contra el narco”, iniciada por el expresidente Felipe Calderón.
El punto más álgido fue en 2017 y las mujeres de entre 15 y 19 años son las que más desaparecen a nivel nacional, lo anterior vinculado a fenómenos como la trata. En el caso de Oaxaca, la entidad figura con 123 mujeres desaparecidas.
Según Jairo García, en el territorio oaxaqueño son mujeres de 15 a 17 años las que más desaparecen. Los datos de la unidad indican que la mayoría son jóvenes que se van de sus casas por problemas familiares, otros casos refieren a personas que están presas, sin conocimiento de sus padres o tutores.
¿Sin localizar o desaparecida?
Hasta inicios de diciembre de 2019 sumaron 364 las personas “no localizadas” y de éstas 197 son mujeres. Tras labores de búsqueda, las autoridades lograron localizar a 348 personas; 188 de sexo femenino. La diferencia entre personas sin localizar y desaparecidas, es la presunción de que se cometió un delito.
Y pese a la tendencia nacional, asegura que hasta el momento no hay casos de desapariciones o no localizaciones relacionadas con células delictivas de trata o secuestradores. Si hay indicios de esos delitos, los casos se canalizan a las áreas especializadas en ello.
En términos de incidencia, precisa el funcionario, la mayor concentración de casos sucede en la región de los Valles Centrales. Lo anterior, dice, se considera por el número de pobladores en esa región, pues es la más habitada.
¿Búsqueda?
Ante la gravedad de esta situación, en Oaxaca desde 2011 ya no hay que esperar 72 horas para denunciar un caso de desaparición o no localización ante un Ministerio Público que requerirá datos generales, señas particulares, fotografías recientes y sin edición o filtros para ayudar a las investigaciones, debido a que “es común que se entreguen fotos que no coinciden con las personas que se reportan”.
Uno de los mecanismos de búsqueda con el que se cuenta son las alertas Amber y Rosa, para personas que se presume que estén en riesgo de sufrir un daño a su integridad. Para que se active una alerta Amber debe tratarse de niños y adolescentes de hasta 17 años. La Rosa se activa en desaparición de mujeres, sin importar su edad.
En el caso de Martha y su mamá, las autoridades anunciaron en enero de 2019 la detención de Félix “N”, como probable responsable de ambas desapariciones. A un año de la aprehensión, el hombre no ha declarado su paradero y ellas no han sido encontradas.