El dispositivo se efectuó alrededor del mediodía, con la participación de al menos 100 uniformados y 10 patrullas.

En el operativo no hubo resistencia de personas ni detenidos; solamente reclamos de algunos comerciantes que acusaron que los policías además de llevarse su mercancía, se robaron el dinero de la venta.

Según informó el ayuntamiento, la Coordinación Municipal de Protección Civil, la Dirección de Mercados y la Subdirección de Vialidad, con apoyo de elementos de Seguridad Pública, retiraron los puestos en el primer cuadro de esa ciudad istmeña.
Lo anterior debido al alto riesgo que representa este tipo de productos, en una zona donde confluyen diferentes giros de venta que incluyen material flamable y donde existe una gran afluencia de personas”.
