De acuerdo con los registros del órgano autónomo, hasta el siete de julio, se habían iniciado 44 quejas y 40 cuadernos de antecedentes, principalmente contra autoridades municipales, contra la dependencia estatal de parte de personal de salud que exige mejores condiciones para afrontar la pandemia; relacionadas con temas laborales, impartición de justicia y hasta privación ilegal de la libertad.
Además, se contabilizan 15 quejas relacionadas con filtros sanitarios, así como el cierre de accesos a municipios; dos donde pobladores de comunidades solicitan que se les informe sobre la posible existencia de personas infectadas con Covid-19, y el resto se relacionan con la inacción de los municipios para adoptar las medidas sanitarias.
Según los registros de la DDHPO, cinco de ellas fueron interpuestas por personal personal sanitario considerado en riesgo, pero no se les permite ausentarse de sus labores. Tres quejas son retención de personal de Salud en comunidades; una es de un pasante de enfermería que pidió se le retire del servicio social, y tres son quejas por falta de material y medidas de protección.
Además, hay otras ocho quejas contra los Servicios de Salud de Oaxaca, por cambio de diagnóstico, falta de atención en comunidades y falta de información.
En el rubro de la procuración de justicia suman nueve, tanto contra la Secretaría de Seguridad Pública (SSPO), como contra la Fiscalía General del Estado (FGEO), además de una por la falta de defensores de oficio.
De las quejas contra la SSPO, cinco están relacionadas con inconformidades de personas privadas de la libertad y las condiciones que imperan en las prisiones a su cargo.