Ecoarquitectura, alternativa respetuosa del ambiente y la cultura

Desde hace 15 años, el grupo de arquitectos Ecoconstructores se ha dedicado a la construcción consciente empleando alternativas amigables con el medio ambiente en diferentes poblaciones, colaborando con la reconstrucción de Haití tras el terremoto de 2010; hoy, los oaxaqueños suman esfuerzos para volver a erigir viviendas dignas en el Istmo de Tehuantepec.

En entrevista con Marcos Sánchez Sánchez, miembro fundador del despacho de arquitectos, comenta que la idea principal que originó su proyecto es el aprovechamiento de recursos naturales. Los Ecoconstructores llegaron a la zona devastada por el sismo del pasado 7 de septiembre y desde entonces, han realizado análisis de los recursos que pueden obtenerse y reaprovecharse de los escombros.

En un principio arribaron sólo dos especialistas y a medida que han trabajado con la población, lograron sumar un grupo de más de 150 personas, entre constructores, brigadistas y voluntarios, unidos bajo el propósito de ayudar a la gente a recuperar sus viviendas y con ello, también su vida.

El grupo trabaja en el Istmo de Tehuantepec en diferentes proyectos arquitectónicos que integran la arquitectura con la identidad de los pueblos de la región, se trata de un diseño participativo, comenta Marcos, al tiempo que relata que parte de su estancia ha consistido en hablar con la gente.

La etnografía participante en la que están envueltos los constructores, les permite sabe qué materiales son los que más se adaptan al estilo de vida de la gente en la zona, y partiendo de esa idea, emprendieron el plan de implementar un banco de escombros que permita recuperar material útil, generar empleos y preservar las viviendas vernáculas.

La asesoría de los especialistas a las familias afectadas es totalmente gratuita y además del material recuperado, pretenden integrar a la comunidad en proyectos de autoconstrucción que permitan costear las viviendas que, esta vez, estarán edificadas con la asesoría permanente de ingenieros y arquitectos.

Recuperar el tequio es la alternativa que los constructores proponen para hacer frente a la crisis. Marcos lamenta que con la modernización, la arquitectura comunitaria esté desplazada por el consumismo, pues los materiales industriales no están al alcance de las poblaciones que apenas y tienen caminos, además, dichos materiales no son apropiados para las comunidades.

Por ello, el arquitecto considera que la estrategia de demolición y venta de materiales del gobierno es inapropiada, orientada a favorecer a las empresas, y como opción, plantean una construcción que recupera ladrillos, vigas de madera y recuerdos valiosos que quedaron sepultados tras el sismo.

Asimismo, asegura que los prototipos que proponen otros constructores no son la solución, sino emplear el dinero que otorga el gobierno a modelos que respondan a las necesidades de cada familia y mejoren las viviendas. “Los arquitectos tenemos la posibilidad de ser los ojos y la voz de la gente”, sentenció al respecto.

El siguiente paso para Ecoconstructores es involucrar a organizaciones y entes financieros que puedan patrocinar lo que haga falta para comenzar a construir. Hasta el momento hay promesas de apoyo por parte de ONG’s, sin embargo, éstas no se han concretado y probablemente no sean suficientes.

Para lograr erigir las viviendas también piden la solidaridad de voluntarios, sobre todo que la gente conozca sus propuestas a través de su página web y en Facebook para que apoye las iniciativas que apuestan por la identidad y la sustentabilidad.