En la protesta, recordaron que el 9 de abril del año 2021 uno de sus compañeros trabajador del MACO hizo guardia nocturna en las instalaciones del museo que se encontraba en poder del personal, que reclamaba el pago de sus sueldos y que permanecía en el inmueble como forma de resistencia para evitar ser despedidos.
Antes de este desalojo, puntualizaron, llevaban 12 meses sin recibir el pago de sus salarios. Según los extrabajafores, también sufrían abusos de sus patrones y hubo dos intentos de desalojo sin orden judicial, a los que se sumó la privación de la libertad de la Directora y la Coordinadora de Servicios Educativos, hostigamiento constante de la Policía Auxiliar, amenazas e intimidaciones para provocar la renuncia a sus derechos.
“Pero fue mayor nuestra insistencia en mantener el MACO abierto a todo público, en funcionamiento constante, a base de nuestro esfuerzo para lograr los recursos y así sostener la operación del museo, ante la evidente falta de interés y capacidad de la Asociación Civil “Amigos del MACO” para resolver los problemas económicos del museo pero cuya prepotencia y soberbia primitivas provocaron el cierre violento del Museo aquel 10 de abril de 2021”.
Los extrabajadores del MACO denunciaron que a dos años, sigue sin resolver el pago de sus salarios, sin justicia ante el desalojo violento e impune la violación a sus derechos humanos y laborales.
Sobre el proceso que mantiene en contra de la asociación, los extrabajadores denunciaron que el proceso está detenido porque no aparece un supuesto testigo de la parte patronal.
