A 3 años de la Alerta de Violencia de Género, han asesinado a 334 niñas y mujeres en Oaxaca: GES Mujer
El 60% de los crímenes se concentra en tres regiones: el Istmo de Tehuantepec representa el nivel más elevado con 25%, seguido de Valles Centrales y Cuenca de Papaloapam
Oaxaca de Juárez.— A tres años de la Alerta de Violencia de Género (AVG) que la Secretaría de Gobernación (Segob) decretó en 40 municipio de Oaxaca, 334 niñas y mujeres fueron asesinadas de manera violenta, de acuerdo con el Grupo de Estudios Sobre la Mujer “Rosario Castellanos” (GESMujer).
Desde esta declaratoria, el 60% de los crímenes se concentra en tres regiones. En el Istmo de Tehuantepec representa el nivel más elevado con 25%, le sigue Valles Centrales con 20% y la Cuenca del Papaloapam con un 15%.
La organización; sin embargo, sostiene que los datos son fríos y, no alcanzan a dimensionar “la indignación, el dolor, la impotencia de cada familia que ha enfrentado la pérdida de una hija, una madre, una hermana, una abuela, pues la violencia machista no respeta edad, condición social, económica ni ninguna otra”.
Mientras persisten los feminicidios y asesinatos violentos de niñas y mujeres, asegura que el acceso a la justicia se torna más difícil para las mujeres de comunidades indígenas y afromexicanas, además de estar invisibilizadas en los registros hemerográficos y digitales disponibles, señala.
Sobre el mecanismo de Alerta de Violencia de Género y la instalación de los Consejos Municipales de prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres en los 40 municipios que ya contempla la Ley Estatal, afirma que sus resultados son cuestionables.
Foto: Christian Jiménez
Lo anterior porque de acuerdo al Monitoreo de Violencia Feminicida del GESMujer, el 57% de la violencia feminicida ocurrió en municipios con alerta de género y el 43% en municipios sin alerta.
“Lo que implica que no hay una diferencia entre contar con el mecanismo que carecer de él, o bien que la violencia hacia las mujeres que se focalizaba en 40 municipios, a tres años se ha extendido a otros que no estaban identificados como de alto riesgo”.
Asimismo, advierte que la pandemia es un factor que agrava las condiciones de riesgo para las mujeres, en todos los ámbitos, pero innegablemente en relación a la violencia, lo que implica la urgencia de atenderla, con las debidas medidas de protección.
GESMujer menciona que como integrantes del movimiento feminista han denunciado las barreras sociales, culturales e institucionales que limitan el ejercicio pleno de los derechos de niñas, jóvenes y mujeres.
También sostiene que a tres de años de la alerta en Oaxaca, los resultados evidencian la falta de voluntad política para contar con un diagnóstico real de la problemática; ausencia de coordinación entre las instituciones responsables de la prevención, atención, sanción y erradicación de las violencias por razón de género y la impunidad como consecuencia de negligencias y omisiones ocasiona que niñas y mujeres sigan siendo violentadas.