El organismo emitió la recomendación siete años después de ocurridos los hechos en este hospital.
En la queja, relata que aproximadamente las 20 horas del 27 de enero de 2017, llevó a la madre de los bebés al hospital porque presentaba dolores de parto. La mujer fue atendida por una doctora en el área de urgencias, quien le indicó que debía caminar y que a las 24 horas la ingresarían para las labores de parto, sin embargo, no fue atendida sino hasta las 14 horas del día 28 de enero. Hasta ese día es que pasó a cirugía y nació el primer bebé que logró vivir aproximadamente 36 minutos.
Durante la intervención, los doctores se percataron de que había otra bebé quien logró vivir un poco más de tiempo; pero a la madre nunca le informaron nada, sino hasta las 17 horas en que se acercó a preguntar al pediatra por el estado de salud de sus dos hijos. En ese momento le informaron que uno de los bebés había nacido con un tumor en el estómago y que estaban haciendo lo posible por salvarle la vida, y que el segundo bebé se encontraba bien de salud; es decir, mintieron.
Al ser las 22 horas, permitieron a la madre ver a la bebé que aún seguía viva; sin embargo, lloraba mucho, y la madre pidió a la enfermera que si podría revisarla. “No fue sino hasta 20 minutos después que llegó un doctor a revisarla, mientras que la madre fue llevada al sanitario, y al volver, el guardia de seguridad le pidió salir, por lo que se trasladó a la sala de espera, y no fue sino hasta las tres horas del 29 de enero de 2017, que el guardia de seguridad le indicó que podía pasar y que su bebé había fallecido, y una doctora le manifestó que hicieron todo lo posible para salvarla”.
De igual manera pidió que se les proporcione la atención psicológica correspondiente, como víctimas directa e indirecta de los hechos ocurridos.