Crisis de la basura en Oaxaca: “Ahogan” 77 toneladas diarias de desechos al río Las Nutrias, en Juchitán
En el cauce de este afluente se ubican dos grandes basureros que las autoridades llaman “Centros de Transferencia”, y que son donde se depositan los residuos urbanos recolectados en la ciudad
Juchitán. – El río Los Perros o Las Nutrias de Juchitán presenta un alto índice de acumulación de residuos sólidos, además de la captación de aguas residuales que contaminan el manto freático donde se alimentan los pozos de agua potable; además, en periodos lluviosos desborda las partes bajas e inunda las viviendas del sur de la ciudad.
Las autoridades municipales, integrantes del Comité de Cuenca y ambientalistas muestran preocupaciones por el creciente deterioro del río, que en zapoteco se conoce como Guigu Bicu nisa. La falta de recursos económicos y la escasa participación de la sociedad juchiteca, que todos los días produce 77 toneladas de basura que se depositan a orillas del río Las Nutrias, nl hacen más que agravar la situación.
En los nueve kilómetros del afluente que atraviesa la zona urbana de la ciudad, revela el integrante del Comité de Cuenca del Pacífico Sur, Tomás Chiñas, se ubican dos grandes basureros que las autoridades llaman Centros de Transferencia, donde 94 recolectores de basura, mediante un carretón jalado por un caballo, depositan la basura que se genera en las viviendas.
De acuerdo con los datos proporcionados por el secretario del gobierno municipal juchiteco, Mariano Rosado, en el llamado Centro de Transferencia Norte se recolectan todos los días 35 toneladas de residuos sólidos con la ayuda de dos camiones de volteo de 14 toneladas y uno de siete toneladas.
En el llamado Centro de Transferencia Sur, también al lado del río, 24 recolectores depositan en el lugar 42 toneladas de basura por día. En ambos lugares, las personas dedicadas a la pepena le prenden fuego a la basura sobrante y producen grandes columnas de humo que inundan la ciudad durante la madrugada, con el irritante olor a plástico quemado.
Foto:Especial
“Para nosotros, la quema de la basura nos afecta, el humo invade las habitaciones y se impregna en la ropa. Hemos pedido a la autoridad que regule la quema, que avisen para que no nos tomen desprevenidos”, dice el presidente del fraccionamiento Reforma, que está a unos metros al sur del basurero conocido como Corona, Gerardo Valdivieso.
El afluente de Las Nutrias nace en las montañas mixes-zapotecas, y desde Guevea de Humboldt serpentea unos 93 kilómetros hasta Playa Vicente, en la Laguna Superior del Golfo de Tehuantepec, pasando por los municipios de Guienagati, Laollaga, Chihuitán, Ciudad Ixtepec, Ixtaltepec, El Espinal, Juchitán y Santa María Xadani.
Son nueve municipios que cuentan con sus sistemas de drenaje, pero como no tienen plantas de tratamiento de aguas residuales, o no funcionan, toda la descarga de las viviendas va directamente al río. Hay un plan de saneamiento del afluente de Las Nutrias, pero es sumamente costoso, confiesa Tomás Chiñas Santiago.
De acuerdo con el integrante del Comité de la Cuenca, el presidente Andrés Manuel López Obrador recibió el estudio para el saneamiento, en el que se establece que sanear los 93 kilómetros del río costará mil millones de pesos y tan sólo para atender los requerimientos de los 9 kilómetros que pasan por la zona urbana de Juchitán se necesitan 300 millones de pesos.
“Nosotros vamos a pedirle al gobierno municipal de Juchitán para que se sume a nuestras exigencias hacia la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para que cumpla los compromisos que contrajo en materia de saneamiento del río Los Perros, cuando se realizaron las consultas del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT)”.
Recientemente, un juzgado federal ordenó a diversas autoridades a sanear y proteger al río Los Perros, y entre las instancias demandadas se encuentran los gobiernos municipales, como el de Juchitán, en cuyas orillas del afluente operan los dos llamados Centros de Transferencia “que no son más que basureros que contaminan el agua, el suelo y el viento”, señala el ambientalista Gonzalo Bustillo.
El coordinador del Foro Ecológico Juchiteco, Bustillo Cacho, dice que a partir de los diagnósticos de las autoridades, se trata de un asunto sumamente complejo, en el sentido de que Juchitán requiere de cuatro plantas de tratamiento de aguas residuales, “reclama el concurso del gobierno federal para rehabilitar la red de drenaje y se deje de verter aguas negras en nuestro río”.