Diputado de Oaxaca pide investigar por contaminación a fabricante de cerveza Corona en Tuxtepec
“No podemos permitir más impunidad de la industria”, señaló Horacio Sosa Villavicencio, diputado local de Oaxaca
Tuxtepec, Oax.- Desde hace varios días usuarios de redes sociales subieron videos donde se aprecia la contaminación del río Papaloapan por descargas de la Compañía Cervecera del Trópico, fabricante de la marca Corona en el municipio de Tuxtepec.
La viralización de estos videos regresó a la agenda pública un viejo debate: la contaminación de la empresa instalada desde 1984 en la ciudad considerada capital industrial de Oaxaca.
“No podemos permitir más impunidad de la industria, que bajo el falso argumento de que impulsa el desarrollo, en los gobiernos anteriores, han pasado por encima de la ley y los derechos del pueblo”, afirmó el diputado Horacio Sosa Villavicencio.
El legislador dijo que es necesario abrir una investigación con la compañía cervecera para determinar responsabilidades y sanciones.
También solicitó públicamente a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del gobierno de México y a la Procuraduría Federal del Medio Ambiente investigar las descargas de residuos en uno de los ríos más grandes de Oaxaca.
Foto: Antonio Mundaca
El gobierno municipal de Tuxtepec informó a esta casa editorial que analiza si el video es reciente, tras lo cual fijarán una postura; mientras que el edil Irineo Molina Espinoza (Morena, prefirió no comentar sobre la investigación propuesta por el legislador Horacio Sosa.
De acuerdo con medios informativos locales, la contaminación que se aprecia en las imágenes corresponden a la última semana y se da en los desagües de la Colonia Santa Cruz y Los Cobos.
Décadas de denuncias
Las denuncias por contaminación contra la cervecera no son nuevas. En enero de 2015, Miguel Torres Prieto, comisariado ejidal de Las Peñitas, agencia municipal de Cosamaloapan, Veracruz, denunció la muerte de centenares de peces en los afluentes del río Tonto y Papaloapan, en la zona fronteriza.
En aquella ocasión fueron notificadas la Secretaría de Medio Ambiente de Veracruz, la federal y las dependencias ambientales de Oaxaca.
Los residuos tóxicos, de acuerdo al reporte emitido en esa ocasión, provenían de Tuxtepec: la Alcoholera, la colonia Casas Geo y la Compañía cervecera. La respuesta del gobierno municipal tuxtepecano presidido por Antonio Sacre Rangel (PRI), en aquella ocasión, fue el silencio.
Foto: Antonio Mundaca
El 26 de junio de 2019 volvió a suceder el mismo fenómeno. De acuerdo a los resultados de los análisis que fueron realizados en laboratorios especializados de la Universidad del Papaloapan (UNPA), de los campus de Tuxtepec y Loma Bonita, se determinó que la muerte de los peces fue “un agente tóxico irritante que ocasionó en tres especies de peces; destrucción de vísceras y daños en ojos y branquias”.
El estudio fue promovido por la diputada federal Graciela Zavaleta Sánchez y la organización ambientalista Educa, Conserva y Aprovecha la Fauna y Flora Silvestre (Ecaffs A.C.), además de la Capitanía de Puerto de Tuxtepec y pescadores ubicados en la riviera de Oaxaca y Veracruz.
El punto crítico de contaminación se ubicó a 11 kilómetros y las empresas que las comunidades señalaron como responsables fueron la empresa Bio Pappel Printing, la Promotora Industrial Azucarera (PIASA) y la Compañía Cervecera del Trópico. El gobierno municipal, entonces presidido por Fernando Dávila (PT), volvió a guardar silencio.
Foto: Antonio Mundaca
Shakyamuni Chavarro Russell, fundador del movimiento Tributo al Río Papaloapan, dijo a EL UNIVERSAL que no existe voluntad política de las instancias encargadas de cuidar el tema ecológico en Tuxtepec y que tampoco existe hasta el momento un marco jurídico que sancione a las empresas, que llevan años vertiendo contaminantes al río que rodea la ciudad cuenqueña.
“No ven salvar el río como un recurso capitalizable por eso no le invierten, nosotros como colectivos no podemos hacer mucho si no hay autoridades federales que volteen a ver el problema, para ellos son como las denuncias de Facebook, se quejan y ya, pero el tema no trasciende porque no forma parte de una agenda”, comentó.
“Si existiera un marco jurídico que sancionara a las empresas que emiten grandes contaminantes habría posibilidad de algún día salvar el río”, manifestó Chavarro Russell.