Dos municipios de Oaxaca niegan ayuda humanitaria a caravana de migrantes que huyó de Juchitán
Las autoridades de Tehuantepec y Salina Cruz rechazaron destinar un lugar para el descanso de más de mil personas entre las que caminan cientos de mujeres y niñas y niños enfermos, por lo que el contingente se dispersó
Juchitán. – La caravana de migrantes “Jesucristo”, que prácticamente salió huyendo por la tarde de ayer de la ciudad de Juchitán está dispersa en Salina Cruz, luego que las autoridades de ese puerto y del municipio de Tehuantepec les negaron espacios para que descansen niños y mujeres enfermas.
El coordinador de la caravana “Jesucristo”, quien sólo se identifica como el “El Pastor”, acusó que la presidenta municipal de Tehuantepec, Vilma Martínez y el edil de Salina Cruz, Daniel Méndez, no autorizaron un espacio para el descanso.
Por esa razón, los migrantes que pensaban pernoctar anoche en Tehuantepec se quedaron bajo una enorme estructura de lámina, al lado de una gasolinera, en terrenos del municipio de San Blas Atempa, a un costado de la carretera Transístmica.
Antes de las 4 de la mañana de hoy, los migrantes enfilaron hacia Salina Cruz, donde encontraron cerrado el acceso a la unidad deportiva donde han descansado los integrantes de otras caravanas, se dispersaron por diferentes puntos de la entrada y centro de la ciudad.
Poco después del mediodía, las autoridades estatales informaron que una comisión de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) llegó a dialogar con representantes del gobierno municipal, con la finalidad de que faciliten un espacio de descanso a los migrantes.
El coordinador de la caravana dijo en entrevista con EL UNIVERSAL que muchas mujeres embarazadas y muchos niños y niñas, vienen enfermos, están sangrando de los pies, traen calenturas, presentan gripe, dolor de cabeza y necesitan descanso.
