Oaxaca de Juárez.– El domingo pasado, el cuerpo de Gloria Z. M. de 45 años fue encontrado en el municipio de Salina Cruz en la región del Istmo de Tehuantepec.
Mientras las autoridades dan curso a las investigaciones, tras la detención de una persona señalada como presunta responsable, ayer, familiares, conocidos y pobladores encabezaron una protesta pacífica en oficinas de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca ubicadas en el municipio mencionado, para exigir justicia.
De acuerdo con información oficial, el cuerpo fue localizado en terrenos de la colonia La Hacienda, ubicada en la carretera costera 200 tramo Salina Cruz - Huatulco. Según información preliminar, Gloria fue asesinada con un machete.
De acuerdo con cifras del Grupo de Estudios sobre la Mujer "Rosario Castellanos" (GES Mujer), en lo que va del año 2023 se contabilizan 61 muertes violentas de mujeres, mientras que la actual administración suma 74 casos, de los cuales 22 han sucedido en los Valles Centrales y 14 en el Istmo de Tehuantepec.
Las organizaciones sociales precisan que en la última semana han sucedido al menos cuatro muertes violentas de mujeres en el estado de Oaxaca, que hasta mayo, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), ocupaba el segundo de todo el país en feminicidios, con 29 casos; sólo después del Estado de México, que suma 42. Según dichos datos, todo el año la entidad ha encabezado y se ubica en los primeros lugares nacionales por cifras de violencia feminicida.
Este miércoles Jesús Romero, secretario de Gobierno de Oaxaca, justificó el aumento de feminicidios en el estado al asegurar que en la administración de Alejandro Murat (PRI), y con anteriores titulares de la fiscalía estatal, "se maquillaban cifras" y no se tipificaban correctamente los delitos.
Aseguró como ejemplo que la víctima de Salina Cruz estaba ligada a jefes criminales actualmente presos y afirmó que en el anterior sexenio dicho delito se hubiera tipificado como homicidio; sin embargo, en el actual gobierno estatal y con Bernardo Rodriguez Escamilla, al frente de la fiscalía oaxaqueña, se reclasifió a feminicidio
