Aunque Rojas Cruz radica por lapsos en la comunidad mixteca y en Estados Unidos, la colectiva confía en que ello no sea un impedimento para que se aplique la ley en el caso.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) no ha dado a conocer cuántas son las carpetas de investigación que ha iniciado por violencia digital durante la administración saliente.
En julio de 2019, la LXIV Legislatura reformó el Código Penal del estado para tipificar delitos contra la intimidad y sancionar a quien divulgue, comparta, distribuya, publique y/o solicite imágenes, audios o videos de una persona desnuda parcial o total, así como de contenido íntimo, erótico o sexual, impreso, grabado o digital, sin el consentimiento debido.
Las sanciones van de cuatro a ocho años de prisión y multa de mil a 2 mil veces el valor diario de la unidad de medida y actualización vigente, entre 84 mil 490 a 168 mil 980 pesos.
Ante la omisión de las autoridades, activistas de Marea Verde Mixteca se movilizaron en la comunidad de San Marcos Arteaga para pegar en las calles fichas con el rostro de Usiel Rojas Cruz; además, lo denunciaron en redes sociales.
“Es importante mencionar que en casos como éstos, sin los resultados de las autoridades, la denuncia pública en espacios físicos y redes sociales se ha convertido en una herramienta de acompañamiento y visibilización de la violencia que viven las mujeres mixtecas”, señalan las activistas.
Decenas de mujeres de comunidades indígenas como San Marcos Arteaga, agregan, son expuestas a estos delitos, revictimizadas y señaladas por la población; por ello, muchas viven su proceso en silencio.
Por esta razón, Marea Verde Mixteca ofrece acompañamiento legal y sicológico: “Sabemos que es un delito muy común y que está muy presente en la región”.
El 29 de junio pasado, un tribunal dictó dos sentencias condenatorias —por seis y un año de prisión preventiva— contra un hombre identificado como A. J. L. B., a quien se le aplicó la Ley Olimpia, luego de que se le hallara responsable de los delitos de violación a la intimidad sexual y violencia familiar en agravio de una joven de Oaxaca.
Tras su fundación, Marea Verde Mixteca ha revelado y denunciado la existencia de al menos dos redes de distribución de contenido íntimo en la región; ninguno de los casos se ha judicializado.