Piden debate a titular de la Semarnat por Tren Transístmico
Acusan a Víctor Toledo de omitir peligros a los que se expone la flora y la fauna con este proyecto
Los coordinadores de la campaña nacional El Istmo es Nuestro invitaron al titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Manuel Toledo Manzur, a debatir públicamente sobre las implicaciones ecológicas del proyecto denominado Corredor Interoceánico, impulsado por el gobierno federal.
El coordinador regional del Comité Nacional para la Defensa y Conservación de los Chimalapas, Miguel Ángel García Aguirre, dice que el titular de la Semarnat ha “minimizado los impactos negativos” que traerá la rehabilitación del Tren Transístmico que corre de Salina Cruz (Oaxaca) a Medias Aguas (Veracruz).
—Lee también: Piden a Semarnat no aprobar Manifestación de Impacto Ambiental del Tren Transístmico
García Aguirre recuerda que en el foro Naturaleza, Derechos Indígenas y Soberanía Nacional, realizado el pasado 11 de febrero en el Colegio de San Idelfonso, en la Ciudad de México, el secretario de Medio Ambiente reconoció que las consultas no se apegaron a los estándares internacionales, pero dijo que el Tren Transístmico y el Maya “van por que van”.
“Hemos invitado a debatir, públicamente y de forma transparente, al titular de la Semarnat. Nos dijo que está dispuesto hacerlo y proponemos un debate con científicos especialistas en medio ambiente. Queremos que el debate se realice el martes 3 de marzo, en la Universidad Nacional Autónoma de México [UNAM]”, detalla Miguel Ángel García Aguirre.
De acuerdo con los coordinadores de la campaña El Istmo es Nuestro, la rehabilitación de los 182 kilómetros de vía del transístmico pone en peligro la flora y fauna de unos 15 pueblos indígenas ubicados en la zona norte de la región istmeña.
“Parece que la Semarnat no tiene compromisos para afrontar el cambio climático. Por eso queremos debatir”, insiste.
Por su parte, el asesor de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), Carlos Beas Torres, lamenta que en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que presentó el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), para obtener la autorización y modernizar 63 kilómetros de vía desde Medias Aguas (Veracruz) a Tolosita (Oaxaca), sólo contemplen la aplicación de un millón 200 mil pesos, durante tres años, para mitigar los daños ambientales.
“Es una cantidad ridícula. Eso significa que por año aplicarán 400 mil pesos, supuestamente para resarcir las afectaciones a la flora y a la fauna con los cortes de curvas y eliminación de pendientes”, comenta.
Además, dice, ya hay resistencias de los pueblos indígenas en contra del transístmico, como la que muestran los ejidatarios de San Juan Guichicovi, que se ampararon ante el Juzgado Sexto de Salina Cruz, el pasado miércoles 26 de febrero.
Conocer el Istmo
Los coordinadores de la campaña y de organizaciones sociales que reclaman una consulta, apegada a los estándares establecidos por el artículo 169 de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), cuestionan las declaraciones que recientemente formuló el responsable del Corredor Interoceánico, Rafael Marín Mollinedo, quien dijo que los que se oponen al proyecto ni son del Istmo y tampoco conocen la región.
“Esas declaraciones son de risa”, responde Miguel Ángel García Aguirre, quien aclara que ha trabajando en la defensa del territorio comunal desde 1978: “Tenemos 42 años caminando por toda la región del Istmo e incluso, durante el gobierno de Ernesto Zedillo lanzamos la primera campaña El Istmo es Nuestro”, asevera.
“Por lo que vemos, quien no conoce el Istmo y tampoco su historia es justamente el señor Marín Mollinedo porque, si la conociera, supiera que este proyecto desarrollista que quiere imponer el gobierno de la 4T es el mismo que los pueblos del Istmo le rechazaron y echaron abajo en los tiempos de Ernesto Zedillo en la presidencia de México”, señala.
Y agrega: “Nos oponemos al referido proyecto no porque no queramos al Istmo, sino porque ese plan va a depredar los recursos naturales del sur de Oaxaca y dejará a los pueblos en condiciones de mayor vulnerabilidad frente al gran capital nacional y extranjero, y pondrán en riesgo la soberanía de México”.
El asesor de Ucizoni, Beas Torres, considera que la postura emitida por Marín Mollinedo fue desafortunada: “Él y su equipo de fuereños son los que no conocen el Istmo y por esa razón ni siquiera saben cómo deben actuar frente a las comunidades indígenas que sólo quieren conocer los impactos del proyecto”, lamenta.
