Pie para la foto de esta nota o para el vídeo relacionado.:
Foto: Edwin Hernández
La Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) exigió al gobierno de Oaxaca una solución inmediata al conflicto en las escuelas “Presidente López Mateos” y “Sor Juana Inés de la Cruz” de Tlacolula de Matamoros, además del castigo a los integrantes de la Comisión Representativa de Tlacolula, a quienes señala como responsables de la violencia en esta institución educativa.
Ayer se registró un nuevo enfrentamiento entre pobladores por la disputa del edificio que alberga ambas escuelas: un grupo de padres de familia y profesores sostiene que debe de continuar la reconstrucción de las instalaciones, y mantenerse sobre este predio en el que se han ubicado desde hace más de 60 años; mientras otro grupo busca que sean reubicadas para construir ahí presuntamente un centro comercial.
El choque de ayer fue disuelto por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO) a través del uso de gases lacrimógenos.
La Sección 22 del SNTE acusa de la violencia a los miembros de la Comisión Representativa de Tlacolula, quienes pretenden que las escuelas sean reubicadas fuera del centro del municipio. El organismo gremial señala que dicho comité es “maniobrado” por Cony Robles, expresidenta municipal de Tlacolula de Matamoros.
Mientras que su grupo de choque es integrado por Agustín Aguilar Chagoya, Pedro Zamora, Nobel Jiménez, el Pseudo licenciado Javier, René Chagoya Violeta Balseca, Elio Morgan, Ulises Santiago, Alejandro Santiago, Vladimir Santiago, Francisco Quero y “demás personeros que bajo intereses personales siguen provocando disturbios en la comunidad a fin de obtener prebendas a partir del conflicto que inició el edil de Tlacolula, Carlos León Monterrubio”.
Foto: Edwin Hernández
El sindicato agregó que en el transcurso de esta semana, los padres de familia manifestaron que los actos de hostigamiento y persecución fueron incrementando “por los personajes que hoy arremetieron contra los policías estatales que resguardaban el espacio escolar”.
“Ante el aumento de los actos vandálicos que estos personajes causan contra el recinto escolar, poniendo en riesgo la integridad física y psicológica de los padres de familia de las escuelas primarias, la Sección 22 exige al gobierno estatal la inmediata solución del conflicto, así como la sanción correspondiente a quienes incitaron la quema de los cimientos de las aulas en reconstrucción y la destrucción de los bienes”, demandó.
La postura de la Sección 22 del SNTE, reiteró, es que continué el proceso de reconstrucción de las instalaciones en el mismo espacio que han ocupado por más de 60 años. “No aceptaremos la reubicación escolar por intereses comerciales y personales de un disminuido grupo que dice representar a Tlacolula”, recalcó.