La Sección 59 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) suma a sus filas 15 escuelas del nivel básico debido a que durante el proceso de paro escolar, que se desarrolló en el mes mayo y junio de este año, por parte de la Sección 22 adherida a la CNTE, los padres de familia pidieron su presencia.

La secretaría general de la gremial, Victoria Cruz Villar, señaló que el proceso de cambio de sección en las escuelas también implica la participación de los docentes de las mismas escuelas que abandonaron el mando de la Sección 22.

Apuntó que son cerca de 35 profesores que ahora forman parte de la Sección 59 del SNTE, pues junto con los padres de familia estuvieron de acuerdo en la nueva forma de trabajar.

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La sección disidente imparte clases en 90 escuelas, de los tres niveles de educación básica, ubicadas en la zona

Explicó que son planteles rurales indígenas y comunitarios del nivel preescolar y primaria, ubicados en las ocho regiones del estado.

En todas las escuelas, dijo, los padres de familia realizaron el proceso de consulta con los maestros y de las autoridades locales para respaldar su decisión y garantizar la presencia de otra sección para coordinar el proceso escolar.

En todo el estado son 500 escuelas las que se encuentran bajo la educación de docentes de la Sección 59, lo que representa alrededor de 35 mil estudiantes y más de tres mil trabajadores de la educación.