Mi objetivo es dejar un nuevo sistema de Salud: Murat
Va por renovar la infraestructura hospitalaria en las regiones, dice
Vienen los tres mejores años para Oaxaca”, vaticinó el gobernador Alejandro Murat Hinojosa en el Centro Cultural y de Convenciones (CCCO), como cierre del mensaje que dio a los oaxaqueños con motivo de su Tercer Informe de Gobierno y en el que aseguró que la entidad avanza, según indicadores como Coneval.
Justo a la mitad del camino y con mil 109 días de mandato por delante, Murat Hinojosa asegura que tiene como fin legar un sistema de Salud reestructurado, que se concrete el Corredor Interoceánico y que se culminen obras como las carreteras a la Costa y al Istmo, que han estado abandonadas por más de una década.
En entrevista con EL UNIVERSAL, reconoce que, al igual que en todo México, la seguridad es de los principales retos de su gobierno, porque la entidad “no es una isla” e incluso confiesa que le gustaría que al final de su sexenio Oaxaca fuera el estado más seguro.
Asegura que el estado tiene potencial humano para afrontar el reto de convertir al Istmo en un polo de desarrollo y que su gobierno tiene el compromiso de escuchar a los pueblos originarios para que este desarrollo se concilie con su visión del mundo y los beneficie.
Es la mitad de camino y si bien señala que hay avances, acepta que son grandes los retos.
Según su balance, ha cumplido 301 de 600 compromisos de campaña, del resto ¿cuáles representan mayores retos?
—El primero es el Corredor Interoceánico. Estoy convencido de que Oaxaca va a poder generar el motor más importante de todo el sureste, está llamado hacer el centro logístico de valor agregado más importante del hemisferio; es de esos proyectos que hará cambios estructurales. Uno de mis objetivos es que este proyecto se consolide, de la mano del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Otro de los más importantes es el sistema de Salud. Por un lado es la reestructura administrativa, tenemos un problema importante de deuda, por que no se le pagaba ni al SAT ni al ISSSTE, y por otro lado la parte de atención. Se trata de consolidar toda la red de Centros de Salud. Cuando llegué, heredado del gobierno anterior, más de 400 habían perdido su certificación. Hoy hemos certificado 100 y quisiera acabar los 300 que faltan.
Es importante porque ahí se atiende el primer nivel y si ahí hay atención y medicinas, ya no tienes que ir al segundo nivel que son los hospitales.
También, queremos construir nuevos hospitales, son sustituciones, eso lo quiero aclarar, son los edificios y el equipamiento, ya existe la nómina.
Un nuevo hospital, que sería la ampliación del central que es el Aurelio Valdivieso (Valles Centrales), uno nuevo en Tuxtepec (Cuenca), otro en Huajuapan (Mixteca), terminar el de Ixtlán (en la Sierra Norte) e inaugurar el hospital de especialidades del Istmo.
En la Costa, terminar el equipamiento de los de Huatulco, Puerto Escondido y Pinotepa Nacional, con eso estaríamos atendiendo a las ocho regiones de Oaxaca, porque en la Sierra Sur tendríamos los Centros de Salud.
Con ello, estaríamos dejando un nuevos sistema de Salud para todas y todos los oaxaqueños. Para mí, desde la perspectiva social, eso es fundamental.
Y lo que más ocupa a los oaxaqueños, la seguridad. Por lo menos mantener a Oaxaca entre los 10 estados más seguros, pero mi objetivo sería que fuera el más seguro del país.
¿Está lista Oaxaca para un proyecto de la magnitud del Corredor Interoceánico?
—Por su puesto que está lista, ha estado lista desde hace más de 100 años, cuando se arrancó en 1908 el Tren Transísmico, pero la realidad de la Revolución quiso que este proyecto parara y a 100 años de distancia siempre ha sido parte de la conversación de los oaxaqueños.
Y lo más importante, los indicadores de Ceneval ratifican que tenemos el capital humano para enfrentar este desafío, uno de los cuatro proyectos emblemáticos del gobierno federal.
El Presidente nos ha visitado 11 veces. ¿Qué representan tener la confianza de la Federación? ¿A qué lo compromete?
—Es la mejor oportunidad para transformar a Oaxaca. Celebro y agradezco que el Presidente haya volteado al sureste. Los programas que él tiene, como el Corredor Interoceánico, son un músculo muy fuerte para transformar la entidad, pero con un acento muy importante: reconociendo al Mexico profundo, lo que significa tener una política incluyente.
Oaxaca debe estar recibiendo más de 20 mil millones en apoyos de programas sociales, eso ayuda a revertir la pobreza. Hay un equilibrio entre detonadores económicos y la inclusion social.
¿Por qué el Presidente consiente tanto a Oaxaca?
—Vio la grandeza cultural e histórica, que tiene qué ver con los pueblos originarios y esa cultura ha permitido generar una sinergia especial. Un ejemplo es el tequio y el trabajo comunitario que tienen las comunidades, que es la semilla de dos programas muy importantes del gobierno federal: La Escuela es Nuestra y los caminos a comunidades rurales, que en diciembre se entregarán los primeros 30.
Considerando los eventos recientes, ¿los oaxaqueños se pueden sentir seguros?
—Por supuesto que sí, esto es un trabajo diario, pero no algo estático. La seguridad es el reto más grande que hoy no sólo tiene Oaxaca, sino el país. No somos una isla y eso lo hace más complejo.
Si hay otros estados con mayor nivel de contaminación delictiva, uno debe tomar las medidas para que no afecte al estado. Lo que te diría es que ese es mi trabajo y me ocupación todos los días, que los oaxaqueños se sientan seguros.