El aerogenerador siniestrado corresponde al parque eólico propiedad de la firma Zuma Energía, que en su página web se presenta como el “productor independiente líder de energías renovables en México”. Dicho parque tiene capacidad para producir 50 megawatts de energía, gracias a la fuerza del viento.
Fuentes de las compañías eólicas que operan en el Istmo confirmaron que en un lapso de 10 años, ocho aerogeneradores se han incendiado, algunas veces por el sobrecalentamiento del Nacelle (Nacel), o cabeza de la torre desde donde giran las palas.
Las pérdidas económicas son enormes. De acuerdo con las propias compañías, un aerogenerador en funciones, como el que se incendió ayer, cuesta unos dos millones de dólares, citaron las fuentes de las empresas eólicas.
De acuerdo con el gobierno de Oaxaca, actualmente en la entidad se produce el 62% de la energía eólica generada en el país con 28 parques en operación y 2 mil 756 megawatts (mw) de capacidad instalada.
Sólo en Juchitán de Zaragoza se estima que existen mil 200 aerogeneradores en 11 parques, correspondientes a 10 empresas desarrolladoras como la CFE, Iberdrola, Cemex, Acciona, EDF, Peñoles, Eyra, Gamesa, Demex y Enel.