Sección 22 califica como “una afrenta para Oaxaca” designación de Heliodoro Díaz como titular de Seguridad Pública
El funcionario fue secretario General de Gobierno en el sexenio de Ulises Ruiz durante el conflicto político-social de 2006 en Oaxaca, que dejó desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos
Oaxaca de Juárez.– La Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) calificó como una “afrenta para Oaxaca” la designación de Heliodoro Díaz Escárraga como el nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSPO), lo anterior dado que dicho funcionario fue el secretario General de Gobierno de Ulises Ruiz durante el movimiento social de 2006-2007.
Mediante un comunicado, la sección sindical aseguró que este nombramiento es “sinónimo de muerte, represión, desapariciones y persecución” que “se traducen en la figura nefasta de Heliodoro Díaz Escárraga a quien hoy el gobierno de Alejandro Murat cobija desde la Secretaría de Seguridad Pública, la misma que sirvió para reprimir al pueblo de Oaxaca en el mandato del carnicero Ulises Ruiz Ortiz”.
Ayer, Heliodoro Díaz, extitular de la Coordinación Estatal de Protección Civil de Oaxaca (CEPCO) fue designado como titular de la SSPO por el mandatario estatal, tras el despido de Ernesto Salcedo Rosales, como parte de los acuerdos tomados en conjunto de elementos de la Policía Estatal quienes exigían su renuncia y la de otros funcionarios, así como diversas demandas laborales.
Para el magisterio, este tipo de personajes “nefastos” son premiados por el gobierno pese a su complicidad durante el “derramamiento de sangre” en el 2006 “cuando el pueblo de Oaxaca se levantó para exigir la salida de Ulises Ruiz de la gubernatura”.
Los docentes aseguraron que tras 15 años de la represión que dejó muertos, cárcel y persecución "se imponen en la Secretaría de Seguridad Pública a quien desde la política interna del Estado en la Secretaría General de Gobierno participó en el fallido desalojo y la agresión a los oaxaqueños”.
En este contexto, señaló, la Sección 22 del SNTE, que es parte de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE), se pronuncia en contra de la designación que realizó el Gobierno de Oaxaca.
“Acción que repudiamos y seguiremos rechazando aun cuando asuma su cargo. Las calles, la lucha y la organización decidida de todos los sectores sabrá dar respuesta a la acción errónea de colocar a personajes que sirvieron para reprimir a los maestros, organizaciones y ciudadanos libres que salieron a las calles, defendieron con barricadas y repelieron con el puño izquierdo en alto el ingreso de la Policía Federal Preventiva (PFP) y su operación al lado de cuerpos policíacos estatal y municipal”.
De la misma forma, advirtió que el Movimiento Democrático de los Trabajadores de la Educación de Oaxaca (MDTEO) rechaza el uso de la administración pública para atender intereses del exgobernador Ulises Ruiz; a quien acusan de buscar posicionar a funcionarios en la estructura de gobierno para continuar operando “actos represivos en contra de los oaxaqueños”.
También insistió en que las caravanas de la muerte, los asesinatos, el encarcelamiento y persecución que ocurrió en el año 2006 no quedarán impunes “a pesar de los años porque la cuenta está pendiente con Ulises Ruiz Ortiz y sus secuaces que dejaron sangre a su paso por las calles de la resistencia. Decimos no a Ulises Ruiz Ortiz y sus cómplices para quienes exigimos cárcel y castigo”.
Hace un año, en abril de 2020, este mismo funcionario desistió de su nombramiento como representante de la Secretaría de Gobernación (Segob) en Oaxaca, luego de que diputados locales y federales de Morena emitieron un enérgico llamado a Olga Sánchez Cordero, titular de esa dependencia federal, para rectificar el nombramiento, al considerar que Díaz Escárraga es responsable de la violencia de Estado que desde el gobierno estatal se ejerció en 2006 contra el movimiento social y magisterial, que dejó desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos en Oaxaca.