Ayer, los vendedores intentaron ingresar al zócalo y la Alameda, áreas que permanecen acordonadas por elementos policiacos para evitar su instalación, y aseguraron que el ayuntamiento vendió permisos por más de 40 mil pesos para permitirles el comercio en la zona.
De su lado, el edil negó rotundamente que el operativo para despejar el primer cuadro de la ciudad obedezca a los intereses de la producción de una película, según las declaraciones de uno de los colaboradores del supuesto filme.
En tanto, los vendedores acusaron a las autoridades municipales de no respetar los acuerdos para permitirles realizar sus actividades comerciales tras el pago de supuestos permisos por los que dijeron, pagaron entre 10 mil y 40 mil pesos.
Para exigir la atención a sus demandas, los ambulantes también se trasladaron a Ciudad Administrativa, donde protestaron ante el operativo que instaló en las calles principales de la ciudad en víspera de la temporada alta de visitas. No obstante, grupos que mantienen protestas en el zócalo, continúan instalados en la zona, con puestos ambulantes.