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La fotógrafa relata que fue ella quien planteó al colectivo la idea de hacer un mural con una de sus fotos, parte de un trabajo documental que realiza en Villa Hidalgo Yalalag, de donde es originaria.

Foto: Mario Arturo Martínez
Los integrantes del estudio Kadabra la acompañaron en el proceso de elección de la fotografía que se convirtió en una pieza viva del centro de la ciudad, con el propósito de llevar un poco de la comunidad yalalteca a los hijos que han tenido que migrar.
“Mi interés es llevar las imágenes que hago a esos lugares, aunque esta imagen no fue tomada en la ciudad, incide con el sitio donde están esas personas que tuvieron que dejar la comunidad. La pieza tiene una carga ideológica y política. El arte urbano no es sólo contemplativo”, cuenta.
En la fotografía, tomada en 2018, se aprecia a Melina, adolescente yalalteca que porta una blusa tradicional estilizada, y para la autora de la pieza, retrata cómo la cultura yalalteca, así como la de otros pueblos indígenas, ha ido cambiando a través del tiempo.
“La imagen de Melina es muy poderosa. Es importante entender que como comunidad hemos absorbido aspectos de diferentes culturas… y esta foto tiene la fuerza de enseñarnos la riqueza multicultural. Desde su vestimenta, que es la modernización del huipil tradicional, hasta su cabellera larga y cómo está peinada”, dice.

Foto: Mario Arturo Martínez
La foto, señala, aunque es bella en sí misma, necesitaba ser complementada y por eso, con la ayuda de sus padres, ambos hablantes de zapoteco, decidió añadir un mensaje orientado a la preservación de la herencia cultural.
La inversión y gestión para la instalación de esta foto corrió por parte tanto de su autora como del colectivo, la cual ha cautivado la mirada de propios y extraños; sin embargo, hasta el momento, desconocen si esta idea podrá replicarse en otros puntos de la ciudad.
Desde su graduación de la Universidad Veracruzana, donde cursó la carrera en Fotografía, los trabajos de Citlali han sido exhibidos en Estados Unidos, en recintos como la escuela de fotografía George Eastman House, en Rochester, Nueva York, no obstante, en esta ocasión su obra trascendió de galerías a la calle.
“Como creadora, uno de los principales objetivos es llegar a los lugares donde habitas o generas el trabajo. Mucha de mi obra se ve en el extranjero y no es porque yo no lo hubiera querido mostrar en Oaxaca, sino que a veces aquí no hay esas opciones”, comenta.
Por ello, sostiene, deben tomarse los espacios públicos para compartir, pues la fotografía tiene un papel importante para mostrar la vida de las comunidades. “Por eso creo que desde el extranjero hay tanto interés en mi trabajo porque las imágenes vienen desde dentro de lo pueblos”, apunta.