Demandan penalmente a Síndico y policías de El Tule por robo y amenazas
La denuncia fue puesta ante el Ministerio Público de la Fiscalía General de Oaxaca, por abuso de autoridad de los policías municipales, quienes golpearon y despojaron de sus pertenencias a una persona
El domingo 8 de abril, Génesis Daniel Enríquez se dirigía a su hogar en Santa María El Tule cuando fue interceptado por cuatro policías municipales de esta población conurbada a la capital de Oaxaca.
Sin ninguna razón, afirma, fue detenido, esposado, interrogado y llevado preso a las instalaciones de la comandancia municipal; ahí lo golpearon en diversas ocasiones, le ocasionaron heridas en varias partes de su cuerpo y lo despojaron de cinco mil pesos en efectivo.
Génesis Daniel decidió interponer una denuncia penal ante el Ministerio Público de la Fiscalía General de Oaxaca, con la cual se abrió la carpeta de investigación 1117/CAT/Oaxaca e interpuso una queja ante el Ayuntamiento de Santa María El Tule por el abuso de autoridad de los policías municipales, los golpes a los que fue sujeto y el robo de su dinero.
A partir de su denuncia y queja, la vida de él y su familia se convirtió en un infierno. Desde entonces, asegura, son acosados, perseguidos y amenazados “sin descanso” por las mismas autoridades municipales. Incluso, han intentado sobornarlo.
“Me dijeron que si retiraba la denuncia me darían derechos como ciudadano de Santa María El Tule --municipio que se rige por usos y costumbres o sistemas normativos indígenas--, hasta el derecho de participar en sus asambleas comunitarias”, relata. Génesis Daniel no accedió a retirar la denuncia y entonces, siguieron las amenazas encabezadas principalmente por el Síndico Municipal.
“Me han amenazado con expulsarme a mí y a mi familia del pueblo. Las autoridades municipales también han presionado a la persona que me renta la vivienda en la que vivimos para que nos desaloje, además de que les han tomado fotos a mis hijos para intimidarlo”, afirma.
Para Génesis Daniel ya no se puede seguir viviendo en la incertidumbre y el miedo a que lastimen a su familia. Por ello, urgió al Ministerio Público y a la Fiscalía General del Estado para que avancen en las investigaciones de su caso y actúen contra los responsables del robo, los golpes que recibió y las amenazas.
“A más de un mes de haber denunciado penalmente a los policías y el síndico no hay ningún tipo de solución”, señala.
Exigió justicia, que se le devuelvan los cinco mil pesos que les fueron robados por los policías municipales y que le paguen los gastos médicos generados por las secuelas de los golpes que recibió, y que ya superan los seis mil 500 pesos.