Esta decisión se tomó luego de que los casos de contagios y fallecimientos por coronavirus en el municipio van en aumento, lo cual ha sido confirmado incluso por autoridades federales; además de detectarse que ciudadanos siguen realizando fiestas y iglesias católicas y evangélicas continúan con misas y cultos.
"No podemos permitir que la irresponsabilidad de unos cuantos, ponga en riesgo la salud y la vida de los demás”, señaló el ayuntamiento en un comunicado.
De acuerdo al artículo 193 del Código Penal del Estado Libre y Soberano de Oaxaca, se contempla “prisión a quien intencionalmente propague cualquier enfermedad, sean cuales fueren los medios de que se valga”.
El Cabildo juchiteco también aprobó cerrar los bancos y grandes establecimientos que no pongan en práctica la sana distancia, el uso de cubrebocas y gel antibacterial, dentro y fuera de sus instalaciones.
El alcalde Emilio Montero Pérez precisó que estas nuevas medidas obedecen al incremento acelerado de contagios en Juchitán y el número de fallecidos que supera por mucho a lo registrado por los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
Este desfase de datos, dijo, se debe a que los ciudadanos no están reportando a sus familiares con síntomas del virus a los centros de salud, para su debido monitoreo y atención médica.
“El Cabildo envió esta mañana una nota informativa a la Secretaría de Salud federal, solicitando su apoyo para la atención de esta grave situación y poner en marcha una acción conjunta que mitigue la propagación del virus en nuestro municipio”, informó el presidente.