Fue construido en dos niveles y pensado para abarcar toda una cuadra: la planta alta destinada a la presidencia y el cabildo, mientras que en la planta baja, se encuentra un portal con 32 arcos empleada por comerciantes locales para expender sus productos.
El jueves 7 de septiembre, el movimiento sísmico de mayor intensidad en los últimos 100 años (8.2 grados) sacudió a Juchitán, casas completas colapsaron ante la fuerza de la tierra, entre éstas, su emblemático palacio, que perdió la tercera parte de su estructura.
Tras la tragedia, los juchitecos se sumaron a las labores de rescate, el jueves, un hombre que apoyaba a las tareas, encontró una bandera de México, la tomó entre sus manos y la erigió en medio de los escombros.
La imagen recorre las redes sociales “como un símbolo de que México no se rinde ante las adversidades”, comentan los usuarios.
Las labores de rescate han persistido a dos días de la tragedia de la que hasta el sábado se contabilizaban 46 víctimas, la última, un policía que realizaba la guardia nocturna en el palacio municipal.
Los equipos de rescate de la Marina, la Defensa Nacional y la Policía Federal encontraron el cuerpo de Juan Jiménez Regalado, de 36 años de edad, quien quedó atrapado entre los escombros del palacio municipal, quien, según los primeros reportes, se quedó dormido y no pudo salir del edificio a tiempo.
Sin embargo, se teme que haya más cuerpos de víctimas entre los escombros del inmueble, el cual es reconocido como un ícono de la izquierda no sólo en Oaxaca, sino en todo México.