
Las personas de poblaciones cercanas a la ciudad también padecen de la falta de servicios, es el caso de Teresa, quien acudió a su cita programada para realizarle la prueba del tamiz auditivo a su hijo de 18 meses de edad.
Sin conocer la problemática, la madre acudió al nosocomio en el centro de la ciudad, para practicarle el estudio a su bebé. La respuesta por parte del personal médico fue: “No hay servicio, hasta nuevo aviso”.
“Me indican que hasta los tres meses se le puede hacer esa prueba”, dijo la mujer desconsolada ante la falta del servicio.
Dentro de las instalaciones del hospital, cerca de seis ambulancias permanecen estacionadas. Ninguna de ellas sobre el área de acceso en urgencias.
Pero la ausencia de medicamentos en los centros de salud en las comunidades hace que familias como las del señor Graciano Carrillo, de Linda Vista en Santiago Jocotepec, tengan que viajar hasta siete horas para recibir atención.
En calidad de urgente, en viaje privado que le costó más de 600 pesos, el hombre trasladó a su esposa hasta el hospital general de Tuxtepec, donde desde el martes pasado permanece internado.
El campesino además ha gastado más de 600 pesos en medicamentos para la atención de su esposa.
La espera del alta se ha recrudecido al pasar las noches a la intemperie a bajas temperaturas no acostumbradas en Tuxtepec.
“Me duele hasta la cabeza de no poder dormir del dolor de huesos por el frío”, dice el campesino, quien ante la emergencia salió de casa sin prendas que los cubrieran fresco ambiente.
