El pasado domingo, este medio informó sobre la denuncia de colectivos feministas que llamaban a mujeres afectadas a presentar una denuncia contra L. L. F., un hombre de Juchitán de Zaragoza a quien se le identifica como presunto responsable de las ventas del material íntimo sin consentimiento, con precios que van desde los 500 pesos, a través de la cuenta “Istmo Pack”.
Fue Marea Verde Oaxaca y Mujeres de la Sal lascolectivas que exhibieron la lista de carpetas que se comercializaban, para que las víctimas denuncien. “Si fuiste afectada por este perfil de Twitter, no dudes en denunciar a esta persona. Si lo reconoces y compartiste fotos íntimas con él, ten cuidado. Nosotros tenemos evidencia de mensajes de ventas y datos bancarios donde él recibe los pagos”, manifiestan.
Dicha cuenta fue detectada e investigada por el colectivo DLR, que desde hace un año ese dedica a “cazar” a cuentas en redes sociales que comercian con material íntimo de mujeres sin su consentimiento.
En entrevista, integrantes del colectivo que incluye a expertos en informática señalan que la labor consiste en dar con las redes de distribución de material íntimo y precisan que hasta el momento contabilizan un total de 900 mujeres de Oaxaca víctimas.
No obstante, del total de las víctimas únicamente la mitad ha solicitado acompañamiento legal, que también ofrece el colectivo; sin embargo, se desconoce cuántas de ella han llegado ante un ministerio público a denunciar.
Lo anterior, precisa el grupo, se debe a que las mujeres sufren revictimización por parte de los servidores públicos que atienden las denuncias, quienes señalan y vulneran a las mujeres víctimas de violencia digital.
La colectiva lamenta que cuando las víctimas quieren denunciar, los servidores públicos les pidan ver las fotografías o las criminalizan, por lo que, finalmente, desisten de la intención de iniciar un proceso legal.
De acuerdo con Olimpia Coral, impulsora de la ley que lleva su nombre y que penaliza la violencia digital y la porno venganza, hasta 2019 se tenían detectados al menos 200 canales de distribución de material íntimo de mujeres, sólo en Oaxaca, la mayoría a través de cuentas de Twitter.