Ni la ceguera impide a Desiderio salvar al zapoteco
A la fecha, ha publicado 2 libros para preservar la lengua, y viene otro
Hesenia Ruiz está detrás del computador siguiendo las instrucciones del escritor Desiderio de Gyves. Así ha sido durante cinco años, tiempo en el que él ha dictado pacientemente sus ideas sobre el zapoteco, sus estrategias de enseñanza del idioma y los capítulos de sus tres libros.
La debilidad visual de Desiderio, a causa de la diabetes, convirtieron a Hesenia en su lazarillo en las letras, pues su falta de visión no frenó los ánimos ni la encomienda que el escritor se impuso para contribuir al rescate y preservación del zapoteco.
Nacido en Juchitán el 15 de abril de 1940, Desiderio realizó sus estudios en su ciudad natal y su carrera profesional en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), donde egresó en el año 1962 como ingeniero químico industrial.
En 1964 inició su carrera magisterial como catedrático de Matemáticas, Física y Química en el Instituto Tecnológico Regional del Istmo, desde su fundación. Además, fue nombrado regidor de Cultura y Recreación en el ayuntamiento de Juchitán en 1994 y fungió como director de la Casa de la Cultura del Istmo de 1999 a 2004.
Luego de esa faceta como servidor público, desde hace 20 años se fue a vivir a una comunidad cercana a Juchitán, Santa Maria Xadani, donde 95% de los habitantes hablan y respiran el idioma de los hombres de las nubes, con el fin de trabajar tanto en la estructura como en los procesos de fortalecimiento de la identidad cultural. El resultado son sus tres libros.
Durante los últimos 10 años ha preparado esos libros que tienen como objetivo la enseñanza del zapoteco y su cosmovisión.
En 2016 publicó el primer libro bilingüe: “Xigāba binniza” (numeración zapoteca) , para reivindicar la numeración vigesimal zapoteca en desuso, el nombre original de los números; así como las formas y técnicas para mejorar la enseñanza numérica, a través de puntos y rayas que caracteriza la numeración mesoamericana.
Ahora saca a la luz el segundo libro “Gubidxa: Laquite-né xtiidxa” (Juguemos con su palabra), que busca de la manera más sencilla enseñar el zapoteco, recordando que ésta es una lengua tonal, pero con las instrucciones precisas para la pronunciación.
Diez años lleva Desiderio de Gyves trabajando en sus libros, cuyo fin es la eseñanza del zapoteco.
Además, este libro que se vende por Amazon, incluye un link donde se escucha cada uno de los capítulos en voz de Hesenia, quien en español y zapoteco recita poemas, enumera los ejercicios y explica el contenido.
“Este segundo libro, que realmente debió ser el primero en salir, es resultado de algunos hechos que marcaron profundamente mi ánimo y existencia. Principalmente, mi preocupación por el debilitamiento del zapoteco, en consecuencia de usos, costumbres y la pérdida de otros rasgos culturales”, dice el investigador.
Agrega que el desgaste se da pese a que en Juchitán y en la mayoría de las comunidades del Istmo “tienen prevalencia las lenguas indígenas sin restricción alguna y su práctica es cotidiana y familiar”.
La tercera obra de Desiderio abordará la cosmovisón zapoteca y aún está en desarrollo.