El Batman oaxaqueño que cuida las ilusiones de niños hospitalizados en tiempos de pandemia

Para Álvaro Ariel Gama Martínez, oaxaqueño de 26 años, cuidar las ilusiones de los niños es una de las misiones más importantes de su vida. Por ello, desde hace casi siete años, decidió adoptar  la identidad de Batman para mantener el espíritu infantil de las y los pequeños que, por diversas circunstancias, permanecen en diversos hospitales del estado.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Álvaro confiesa que fue una experiencia propia durante su infancia la que le hizo perder las ilusiones, y a partir de ello se propuso ayudar a mantener la ilusión y la inocencia en los más pequeños.

Hace varios años decidió disfrazarse de Batman en un Día de Muertos, y desde entonces su vida cambió. Pudo observar que los niños lo miraban con asombro y admiración, no dudó entonces en detenerse a saludar a algunos, quienes se alegraron de verlo, portando el traje de uno de los superhéroes más populares.

Foto: Cortesía

Poco después, Álvaro Ariel acudió al Hospital de San Idelfonso Villa Alta a un festival del Día del Niño —por invitación de su hermana, quien realizaba su servicio socia ahí—, donde se presentó con su traje de Batman y pudo convivir con niñas y niños en tratamiento. Desde entonces, buscó oportunidades para acudir voluntariamente a los nosocomios para hacer sonreír a los niños que han cambiado los juegos, por las áreas médicas.

Aunque este Día del Niño, Álvaro no pudo cumplir con el plan de asistir al Hospital de la Niñez Oaxaqueña, donde ha convivido con varios menores en recuperación, a través de su página de Facebook: “Batman contra el Cáncer Infantil”, ha compartido consejos para evitar la propagación del coronavirus.

“Por salud y seguridad de los niños, en este momento no están permitidas las visitas. Yo espero que pronto la situación se estabilice, para poder visitarlos y hacer, el día que se pueda, el festejo por el Día del Niño, y por haber culminado la pandemia”, acota.

Foto: Cortesía

Al respecto, relata que sus visitas consisten en conversar con las y los pequeños para recomendarles que sigan al pie de la letra las indicaciones de los médicos, así como jugar con ellos y hacerles pasar momentos alegres que los motiven a librar batallas contra enfermedades como el cáncer.

“Quisiera decirles a las personas que, si pueden ayudar a alguien en este momento, lo hagan. Hay situaciones en las que tenemos la oportunidad de ayudar y compartir lo que tenemos con quienes más lo necesitan”, finaliza.