Talento oaxaqueño rescata el arte sacro de las manos del tiempo

Pedro Cristopher Ramírez Díaz desde hace 20 años restaura piezas históricas. En entrevista con EL UNIVERSAL, indica que tener esta responsabilidad requiere de un estudio previo sobre su estado para que recobren su estado óptimo

Fotos: Cortesía Cristopher Ramírez
Sociedad 22/09/2020 12:07 Christian Jiménez Oaxaca Actualizada 21:08

Oaxaca de Juárez.— Desde hace más de 20 años, Pedro Cristopher Ramírez Díaz comenzó a emplear su talento e interés por el arte en la restauración de piezas históricas que albergan los templos católicos en diferentes estados del país.

Oaxaqueño de nacimiento, Cristopher se formó en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, donde estudió Arte y tuvo asignaturas de restauración, en las que descubrió su afinidad hacia ese trabajo, el cual involucra no sólo conocer las técnicas de creación artística, sino también de historia y de un gran compromiso con el trabajo.

En entrevista con EL UNIVERSAL, indica que tener la responsabilidad de las piezas históricas de los templos requiere de un estudio previo sobre su estado y de los trabajos de restauración para que recobren su estado óptimo.

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Fotos: Cortesía Cristopher Ramírez

Generalmente, comenta, los gastos de restauración los solventa una parte el pueblo; otra parte lo hace el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y otra, el gobierno federal.

“Hay mucha responsabilidad, y en correspondencia, debe haber mucho cuidado con las piezas”, señala. No obstante, para poder iniciar los trabajos de restauración de las piezas de algún recinto religioso debe existir un proyecto previamente aprobado por el INAH.

En Oaxaca, los templos católicos datan, por lo general, de los siglos XVII, XVI y XV, por lo que su antigüedad aumenta su valor histórico.

Actualmente, Cristopher se encuentra trabajando en la restauración de murales que fueron pintados en 1930, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, junto con otros dos restauradores oaxaqueños. Se trata de una restauración por parte de FIDECULTURAL administrado por CONARTE y el gobierno del estado de Nuevo León.

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Fotos: Cortesía Cristopher Ramírez

En ese lugar, apunta, la problemática que han encontrado es que los trabajos de restauración anteriores se han hecho sobre la pintura original, lo que ha afectado su estado, por lo que es necesaria la liberación de la pintura original para rescatar su valor histórico.

En 2010, Cristopher participó en las labores de rescate, conservación de piezas arqueológicas y limpieza de elementos que pertenecen a la zona arqueológica de Mitla. Al término de las tareas, algunas de éstas fueron llevadas al Templo de Santo Domingo de Guzmán.

Entre algunos de los proyectos en los que Cristopher ha colaborado en labores de restauración de esculturas o pinturas destaca el del templo y exconvento de San Pablo, ubicado en San Sebastián Tutla, en Alotepec.

Al respecto, puntualiza que, además del tiempo, hay otros factores como el clima, es decir, la humedad o el exceso de sol, así como el polvo y la actividad sísmica, los cuales afectan colores y barnices de las piezas que resguardan los sitios con relevancia histórica, mismos que se restauran con diferentes técnicas.

En ocasiones, añade, debido al deterioro de los inmuebles es necesario derribar algunos murales artísticos para lograr restaurar los edificios. Entre los que más han resultado afectados por los sismos destacan el templo del Carmen Bajo y el de San Sebastián Tutla.

Asimismo, indica que los proyectos de restauración son largos, y en diversas ocasiones implican salir a las regiones para restaurar piezas históricas, mismas que se trabajan con técnicas de conservación y rescate que garantizan su durabilidad, agrega el oaxaqueño, quien fue invitado por primera vez a colaborar en el rescate de un órgano y retablo en un templo de la Mixteca hace más de dos décadas.

Pandemia y arte 

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Fotos: Cortesía Cristopher Ramírez

Cristopher combina sus labores de restauración con su trabajo en el taller-galería La Productora Gráfica, en la colonia del Bosque, en la capital oaxaqueña, espacio orientado a brindar a otros artistas la posibilidad de realizar residencias para que puedan colaborar.

Asimismo, cuentan con un espacio de exhibición a modo de galería, así como un taller de grabado que da espacio a artistas no solamente oaxaqueños, sino de otros estados y naciones.

En estos días de nueva normalidad, algunos espacios están viviendo su proceso de reactivación, sin embargo, el espacio cultural artístico que comanda Cristopher se mantiene en pausa ante la pandemia, lo que además ha frenado su solvencia económica, lo cual ha aprovechado para tomar algunos trabajos de restauración.

Asegura que en las próximas semanas planea regresar a territorio oaxaqueño para retomar sus actividades, entre ellas, algunas colaboraciones artísticas entre Oaxaca y Monterrey.

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