Con muestra “Hrusibani” y bailarines internacionales, renace danza en escenarios de Oaxaca
En entrevista con EL UNIVERSAL, el director artístico de “Hrusibani”, Vangelis Legakis acota que Oaxaca fue elegida por la red de compañías de danza y teatro para ser la única sede para presentar la obra
Oaxaca de Juárez.- Tras más de dos años de pausa, el escenario del Teatro Macedonio Alcalá, en la ciudad de Oaxaca, volvió a prender las luces para dar cabida a una puesta en escena en la que participan bailarines profesionales provenientes de Reino Unido, España, Italia, Francia, Singapur, Japón, Austria, Estados Unidos y México.
Así tomó vida “Hrusibani”, que se traduce del zapoteco al español como “renacer”, el 3 y 4 de diciembre pasados, bajo el auspicio de Invernadero Danza, Vangelis Dance Company, Agudo Dance Company, Unity Space y Moves MX, en la que plantean la posibilidad de nuevos comienzos.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el director artístico de “Hrusibani”, Vangelis Legakis acota que Oaxaca fue elegida por la red de compañías de danza y teatro para ser la única sede para presentar la obra.
Sobre la historia que los espectadores disfrutaron en las únicas dos funciones disponibles en el teatro ubicado en el corazón de la ciudad, Legakis relata que se desarrolla alrededor de dos personajes principales, quienes forman parte de la misma familia.
Foto: Mario Arturo Martínez
Uno de ellos representa a una persona viajando por el mundo para encontrar su verdad en la vida, mientras que en la contraparte, representando la estabilidad del hogar, está el personaje que se queda en casa junto con el resto de la familia.
En la puesta en escena participaron 12 bailarinas y bailarines, cinco de ellos mexicanos, uno de Barcelona y los demás de otros países como Japón, Italia, Francia, Singapur Austria y Estados Unidos.
Legakis es coreógrafo, bailarín, productor y terapeuta, quien se especializa en integrar las filosofías del yoga y el qigong dentro de la danza, la interpretación y la coreografía. El punto focal de su práctica, profundiza, es “cómo puede la danza contribuir a nuestro autodesarrollo, construcción de relaciones y armonía comunitaria”.
La coreografía estuvo a cargo de José Agudo, bailarín profesional de flamenco y coreógrafo, quien ha trabajado en el mundo de la danza contemporánea y en creaciones por Europa, actuando con The Charleroi Danses, Ballet national de Marseille, T.R.A.S.H, Shobana Jeyasingh Dance y Akram Khan Company, entre otros.
Para Vangelis, la pandemia fue una oportunidad para poder presentar la obra en México, pues regularmente sitúa su trabajo en Asia; sin embargo, durante la pandemia tuvo la oportunidad de viajar al país para concertar las fechas en las que se presentaría la obra.
Foto: Mario Arturo Martínez
Afirma que éste es el primer paso para que la danza vuelva a los escenarios, pues “los teatros son como un hogar para la gente y un lugar donde pueden reunirse, aún si son de diferentes estatus y referencias culturales. Esta es una perfecta oportunidad para que la gente se relacione y conecte”.
Y añade que la puesta en escena llevó el mensaje de una oportunidad de sanar y los diferentes procesos por los que se atraviesa a lo largo de la vida; ya que señala que en diferentes etapas de ésta podemos renacer y volver a empezar.
Sin embargo, ante el aún latente riesgo de contagio por Covid-19, la obra sólo pudo ser vista por 100 personas, quienes tuvieron que acatar medidas sanitarias como el uso de cubrebocas, toma de temperatura corporal y sana distancia.
Luego de presentarse en Oaxaca, “Hrusibani” llegará a Guadalajara el próximo año, durante un festival de 12 días en el que se presentará en dos ocasiones.
Foto: Mario Arturo Martínez