Ahora, el número de personas es más reducido pero presta una atención inalterable e incluso se permite interrumpir para aclarar dudas.
“El fraude a la ley por eso es tan complejo, porque implica una actividad que puede ser lícita pero que viola principios constitucionales y la relación de los principios constitucionales no se puede sancionar de forma tan fácil como se sanciona la violación a una regla. El principio constitucional es abstracto”, explicó.
Su ponencia “Corrupción, transparencia e integridad electoral” abrió ayer un ciclo de talleres en una universidad privada de Oaxaca.
“Entonces corremos el riesgo de que el proceso electoral”, agregó, “se deslegitime y de que las instituciones sobre todo las electorales y gubernamentales, salgan lastimadas respecto a la confianza ciudadana en ellas”.
“Las elecciones o el sistema político es algo muy serio para dejárselo solamente a los políticos. Porque si no hacemos eso evidentemente toda nuestra tradición democrática, todos los surcos que aramos en la transición democrática, habrán sido arados en el mar”, dijo.
Santiago Nieto abordó la discusión –y aprobación-- sobre la Ley de Seguridad Interior y sus posibles consecuencias para el desarrollo del proceso electoral. Dijo que no le gusta y que algunos de sus contenidos o elementos son “inconstitucionales” e “inconvencionales”, e incluso, contrapuestos a los tratados internacionales que ha firmado México.
Enlistó, por ejemplo, el que señale que toda la información relacionada con la seguridad interior debe ser confidencial; la permisión a las fuerzas armadas para realizar cateos sin el reconocimiento previo de la autoridad judicial que va contra lo que se establece en el Código Nacional de Procedimientos Penales y de una visión garantista del derecho.
“No me gusta tampoco la idea de que los gobernadores o los congresos puedan solicitar al Ejecutivo federal el hecho de que un grupo del ejército intervenga en una entidad federativa. ¿Qué sucede si el gobernador de un partido y en el Congreso es mayoritario de otro?, puede generar un problema de naturaleza política al interior de la propia entidad federativa”, mencionó, entre otros.
“No son compatibles con nuestro sistema constitucional y convencional. México ha suscrito convenios internacionales que no pueden ser infligidos a partir de una ley que los menoscabe. No me gusta y lo que puedo decir, es que en virtud de mi posición como abogado, que es que algunos elementos son “inconstitucionales e inconvencionales”, dijo la noche del jueves en la ciudad de Oaxaca.