Ideología religiosa dividió la fiesta de la Candelaria

Hace más de 30 años que dos mayordomías se encargan de la festividad

Sociedad 02/02/2020 18:34 Juchitán de Zaragoza, Oaxaca Actualizada 18:34

Movidas por la fe, miles de personas celebran este domingo a la Virgen de la Candelaria en la población de San Francisco Ixhuatán, que se localiza en la zona oriente del Istmo de Tehuantepec. Durante seis días, a partir del pasado 29 de enero y hasta el  lunes, se reactivará la economía local, pero sobre todo se recordará que aquí la fiesta se celebra por partida doble.  

En este poblado de pescadores, explica  José Luis Guerra Hernández,  exedil  de Ixhuatán, la fiesta de la Candelaria comienza el 29 de enero con la parada de una enramada de palma que mide unos  200 metros cuadrados.

La palma se corta en los poblados cercanos de 20 de Noviembre y Reforma Agraria Integral desde  principios de enero. Se trata de una actividad comunitaria en la que participan  todos los campesinos que tienen carretas.

Mientras los hombres armaban la enramada, las mujeres, también voluntarias, preparaban tamales despedazando en trozos la carne de res para un  guisado conocido en zapoteco como Beela Chaacha, que se prepara en enormes cazos sobre el fuego de la leña. También hay voluntarios que prenden los cohetes, que anuncian el inicio de la fiesta.

Se trata de una fiesta única que   permite la unidad y la armonía entre las familias

Desde el 29 de enero  empiezan a llegar comerciantes de panes, dulces de cajeta, biznaga, maguey, juguetes e imágenes religiosas. Vienen desde Chiapas,  Veracruz,  la ciudad de Oaxaca y de los pueblos del Istmo, como Juchitán, Ciudad Ixtepec y Asunción Ixtaltepec. Además, migrantes radicados en Los Ángeles, California, retornan para esta fecha.  

La división. Una de las peculiaridades de esta fiesta en Ixhuatán es que desde  hace  33 años se celebra por partida doble, pues tiene dos mayordomías. De acuerdo con pobladores, la sociedad original se dividió por razones religiosas.  

Antes de 1988, año en el que se fragmentó la sociedad encargada de la fiesta, algunos de sus integrantes apostaban por la Teología de la Liberación, una corriente de pensamiento al interior de la Iglesia católica, que colocaba  a los pobres en el centro de la labor  pastoral y que tomó herramientas de las ciencias sociales para entender la realidad latinoamericana.

Ante la negativa de otros  integrantes  de seguir esta corriente teológica, la sociedad se fragmentó, división que posteriormente se profundizaría por cuestiones políticas: unos se identificaron  con el PRI, y otros con el PRD.

A más de tres décadas de esa división, en Ixhuatán la fiesta sigue desarrollándose dos veces.  El pasado  viernes se realizaron dos calendas,  de lado Norte y lado Sur, y  también dos bailes de gala.

Lo único que se comparte de esta fiesta  es la misa que se celebra este domingo, pues  ya no se realizan  dos, como se hacía   al principio de la separación de los socios en dos bandos.

Pese a ello,  el exedil José Luis Guerra Hernández asegura que se trata de una fiesta única que a final de cuentas, permite “la unidad y la armonía entre las familias”.

De acuerdo con  Florencio de la Cruz Valdivieso, actual presidentre municipal, este año el festejo estará blindado por  la Guardia Nacional y la Policía Estatal.
 

Comentarios