“Los cuestionamientos al Tren Transístmico son de campesinos, no de grupos políticos, Presidente”
Anteriormente, López Obrador dijo que su gobierno no tiene ningún problema con el tema del Corredor Interoceánico y acusó a ambientalistas de querer sacar beneficios políticos; Presidente, informado erróneamente: campesinos
Juchitán.– Desde finales de febrero, las autoridades del núcleo ejidal San Juan Guichicovi, del municipio del mismo nombre que pertenece a la zona norte del Istmo de Tehuantepec, esperan que el Juzgado Sexto de Distrito, con cabecera en Salina Cruz, lleve a cabo la audiencia constitucional con actores demandados como la Secretaría de Hacienda (SHCP) y el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI).
En ese entonces, recuerda Vicente Revilla, integrante del equipo jurídico de los campesinos, el presidente de estos ejidatarios ayuujk (mixes), Pedro Albino Juan, presentó un amparo con número de expediente 74/2020, en el que cuestionó la ausencia de protocolos internacionales en la consulta sobre el Tren Transístmico organizada por ambas dependencias federales en marzo de 2019, y demandó la suspensión de los trabajos de modernización de las vías.
Lamentablemente, dice, por la pandemia el Juzgado Sexto de Distrito no ha podido notificar a las autoridades demandadas y por esa razón no se ha desahogado la audiencia constitucional, y mientras no haya audiencia la empresa de participación estatal Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), no podrá realizar ningún tipo de trabajo en los terrenos del núcleo ejidal de esa comunidad indígena, según acordaron los propios ejidatarios.
Foto: Edwin Hernández. EL UNIVERSAL
“Debe quedar claro que quienes exigen ser informados plenamente sobre las implicaciones del Corredor Interoceánico y demandan la suspensión de las obras de cambio de durmientes y rieles, y rectificación de curvas y elevaciones, no son organizaciones sociales, como se acusa desde el gobierno federal, sino que son campesinos del núcleo ejidal San Juan Guichicovi”, precisa.
Otra negativa
El pasado 13 de noviembre, Rafael Marín Mollinedo, titular del programa Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), constató en persona el rechazo de los ejidatarios de Palomares, en el municipio de Matías Romero, al inicio de los trabajos de modernización de la vías, hasta que no acuerden el pago de afectaciones a caminos y parcelas donde siembran pastizales para la ganadería.
De acuerdo con la denuncia que hizo el agente municipal de Palomares, Raúl Martínez, las obras de modernización del tren afectarán 10 kilómetros de largo de las tierras del ejido, y podrían ser mucho más las afectaciones si la empresa insiste en considerar como Derecho de Vía 35 metros en ambos extremos de los rieles. “El FIT no reconoce esas afectaciones y no quiere pagar, pero sin indemnización no permitiremos que pasen”, advierte.
Foto: Edwin Hernández. EL UNIVERSAL
Los ejidatarios y habitantes del ejido Palomares pidieron en esa reunión a Marín Mollinedo y al FIT que, además del pago de las afectaciones, consideren apoyos para la construcción de un tecnológico, un mercado y una clínica de salud, equipada con médicos especialistas. “El martes 24 regresaron y nos dijeron que ya habían conseguido la construcción del tecnológico mediante la creación de una extensión educativa, “pero creen que nos pueden chamaquear”, dice.
Ambos ejidos, Guichicovi y Palomares, se localizan en el tramo ferroviario que comprende las poblaciones de Ubero y Mogoñé, donde los avances en los trabajos de rehabilitación de las vías son nulos, pese a que ya están liberados 809 millones de pesos a favor de la empresa La Peninsular, de Carlos Hank Rhon.
“Los cuestionamientos a la falta de protocolos internacionales en las consultas y la negativa a que inicien los trabajos son de las comunidades, de las poblaciones, de los ejidos, no de los grupos ambientales o políticos, como ha sugerido el Presidente por la información que le proporcionan, pero son engaños, son mentiras”, dice a EL UNIVERSAL el campesino Dagoberto Toribio Severo.
Foto: Cortesía
El lunes 23 de noviembre, luego de que EL UNIVERSAL dio a conocer que campesinos de Santa María Petapa y San Juan Guichicovi pidieron al Alto Comisionado de la ONU que exija al gobierno mexicano la suspensión del Plan Transístmico, ante lo que califican como violaciones a sus derecho humanos, ambientales y de información, en su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que su gobierno no tiene ningún problema con el tema del Corredor Interoceánico y acusó que grupos ambientalistas quieren sacar beneficios políticos. Los campesinos aseguran que al Presidente lo están informando erróneamente.
