Ante pandemia, reconoce el CaSa nuevos alcances con alumnos de Oaxaca, el país y del mundo

Oaxaca de Juárez.— El Centro de las Artes de San Agustín (CaSa), espacio fundado por el artista Francisco Toledo en 2006, lleva ya casi nueve meses adaptado a la realidad que la pandemia por Covid-19 obligó, ante la imposibilidad de hacer actividades presenciales. 

Desde marzo pasado, sus actividades y programas académicos han sido ajustados a nuevas formas de enseñanza, apegadas a las restricciones sanitarias que autoridades de Salud han dictado para evitar contagios en medio de la pandemia por este nuevo coronavirus.

Al respecto, el CaSa ha señalado que en el momento en que cerraron sus instalaciones se plantearon dinámicas para que las personas pudieran realizarlas desde sus hogares, y dirigidas a público de distintas edades.

“Era una manera inmediata para seguir de alguna forma con la vocación del Centro, al tiempo que incentivamos la participación en actividades artísticas. Se crearon concursos y dinámicas para interactuar con algunos de los materiales que se desarrollan en el área de producción artística”, indicó Daniel Brena, director del CaSa.

Con estas actividades, señaló, el CaSa mantuvo contacto con las personas que constantemente consultan la página web del centro de artes para conocer su oferta educativa y actividades artísticas.

El siguiente paso fue proponer talleres en línea. Para esto, "los maestros exploraron distintas plataformas que existen para poder trabajar de manera adecuada con los alumnos, se hicieron tutoriales en video y se complementaron con sesiones en línea", detalló.

La asociación civil Amigos del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) y el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo (CFMAB) crearon kits del material necesario para los talleres teórico-prácticos que han presentado; estos se hicieron llegar a los alumnos y así no tuvieron la necesidad de salir de sus casas, cuando en su momento, la mayoría de las personas permanecía en sus hogares.

Con esta nueva modalidad se impartieron los talleres de: Rótulo mexicano, Acuarela, La casa en la lata. Fotografía estenopeica, Afelpado con agujas, Cestería, Bordado para principiantes y Teñido con tintes naturales.

Sara López Ellitsgaard, presidenta de Amigos del IAGO y del CFMAB comentó que “en estos meses, las instituciones que fundó el maestro Toledo han trabajado en equipo, con más proyectos que antes; esto nos ha permitido ampliar los públicos y se han desarrollado actividades de manera colaborativa”.

Comentó que las convocatorias fueron bien recibidas y cuando fue posible se incrementó el número de alumnos seleccionados, siempre contemplando que fuera un grupo con el que el maestro pudiera trabajar de manera adecuada, incluso, en algunos casos se abrieron dos grupos.

Finalmente, reconocieron que una de las posibilidades que da esta nueva normalidad con las clases en línea es que no importa el lugar de residencia, sólo es necesario tener acceso a internet, pues en los distintos talleres que ofrecieron tuvieron alumnos de distintas regiones del estado de Oaxaca, del país y del mundo.