Critican alteraciones a arquitectura colonial de ciudad de Oaxaca, a 33 años de ser Patrimonio Mundial

Oaxaca de Juárez.— La doctora especialista en antropología e investigadora oaxaqueña, Nelly Margarita Robles García, criticó el exceso en el uso de edificios del Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca como antros y bares; así como otras alteraciones a la arquitectura colonial de la capital del estado.

“No necesitamos ser una cantina para figurar en el mapa nacional”, señaló la investigadora que esta mañana fue reconocida con la medalla “Federico Sescosse Lejeane” 2020, en el marco del inicio de las actividades para celebrar el 33 aniversario de la declaratoria de la zona arqueológica de Monte Albán y el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca como sitio Patrimonio Mundial por la Unesco.

Aunque, apuntó que el centro de la capital oaxaqueña “se ve mejor” que años anteriores; aseguró que las “modas” lo están afectando.

Entre ellas, el exceso de antros, la modificación de las rejas de las ventanas para usarlas como puertas y la utilización y alteración de las terrazas de las casas del centro para que funcionen como bares, restaurantes y sobre las cuales han construido nuevos pisos que atentan contra la altura y la autenticidad; pero, sobre todo, por su uso.

Esta crítica en particular se la señaló al síndico del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, Jorge Castro Campos, a quien también le solicitó impulsar la creación de una unidad de investigación científica y arqueológica de la ciudad y su arquitectura colonial, campo de estudio que se encuentra abandonado, a excepción de algunos esfuerzos individuales.

Nelly Robles recibió la medalla por su trayectoria, sus aportaciones en el campo de investigación y en la elaboración y coordinación de proyectos para la salvaguarda, conservación y mantenimiento del patrimonio cultural. Esta distinción también la han recibido otros dos oaxaqueños: Antonio Martínez, gestor cultural de Teposcolula, y el pintor oaxaqueño Francisco Toledo.

El reconocimiento es entregado por el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos), el cual es un organismo de la sociedad civil asesor de la Unesco y que se dedica a trabajar para la conservación y protección del patrimonio cultural en el mundo, así como a los sitios que han sido declarados Patrimonio Mundial por la Unesco.

Saúl Alcántara Onofre, presidente en México de Icomos, dijo que esta medalla es la más alta distinción para las personas por su trabajo, logros y trayectoria sobresaliente en la conservación, salvaguarda y difusión del patrimonio cultural en México, y la cual se entrega de manera anual.

En la ceremonia también se entregaron los nombramientos a la nueva mesa directiva de la Coordinación en Oaxaca de Icomos.

“Qué mejor día para festejar el aniversario (de la declaratoria de la zona arqueológica de Monte Albán y el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca como Patrimonio Mundial por la Unesco) … Me siento como ganadora del Oscar”, manifestó la investigadora Nelly Robles.