Patricia Alonso, responsable de la CAMI La Paloma en Sonora, dijo que los 8.5 millones de pesos que recibieron serán utilizados para pagar los servicios de los predios donde trabajan y para atender a mujeres indígenas, no obstante, estos recursos serán insuficientes.
“Incluso le planteamos al INPI (Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas) que esto podría ser útil nada más para los tres primeros meses, no tenemos para el resto (del año) y por eso seguimos insistiendo en nuestro derecho de seguir peleando, de seguir luchando por el otro 75 por ciento que ya está presupuestado”, dijo Patricia Alonso.
Las responsables de las CAMIS, que en 2019 atendieron hasta 25 mil mujeres, expresaron que para sortear las dificultades económicas han tenido que pedir préstamos o se apoyan en otras organizaciones sociales que también atienden mujeres.
“Las CAMIS deberían ser retribuidas con recurso suficiente, permanente, y que no estemos peleando cada año este recurso que está etiquetado por ley en el presupuesto (...) En ese sentido, el gobierno federal está incurriendo en violencia institucional”, señaló la responsable de La Paloma.
Para poder seguir operando este año, las inconformes indicaron que necesitarían al menos 14 millones 777 mil pesos para distribuir a 35 CAMIS.