Jesús Peña, representante adjunto de la ONU-DH en México, señaló que “las personas defensoras de derechos humanos y periodistas juegan un papel fundamental para que todas las personas podamos disfrutar de nuestros derechos […] Los homicidios de periodistas y personas defensoras deben ser percibidos como ataques a toda la sociedad”; e hizo un llamado a las autoridades competentes a investigar, juzgar y sancionar a los autores materiales e intelectuales de estos crímenes.
El periodista Armenta Ávalos, originario de Ciudad Obregón, municipio de Cajeme, Sonora, fungía como director general del periódico “El Tiempo de Medios Obson” y del Semanario “Última Palabra”. Debido a una serie de incidentes y agresiones previas, entre las cuales estuvo un atentado con una granada al periódico en 2016, fue incorporado al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, y al momento del ataque contaba con un plan de protección que incluía el servicio de escoltas por parte de la Policía Municipal.
Según la información recabada por la oficina en México de las Naciones Unidas, el atentado se llevó a cabo alrededor de las 15 horas del día 16 de mayo, afuera de un restaurante en Ciudad Obregón, lo cual causó su muerte así también la de uno de sus escoltas, mientras que otro fue gravemente herido.
Finalmente, el organismo internacional con representación en el país, recalcó su llamado al Estado mexicano a garantizar que las instituciones encargadas de proteger a personas defensoras de derechos humanos y periodistas cuenten efectivamente con los recursos humanos, materiales y económicos para su adecuada operación.