El accidente, hasta el momento suma un saldo de 29 personas fallecidas, entre éstas, varios menores de edad, que viajaban a bordo del autobús; mientras que unas 18 personas permanecen internadas y la mayoría se reporta como grave.
Como Diego, familiares de los pasajeros que fueron dados de alta esperan noticias de sus familiares, quienes aún reciben atención médica.
En un comunicado, la empresa Autotransportes Yosondúa lamentó el accidente y aseguró que durante más de 30 años ha cubierto la ruta del accidente y aseguró que colabora con las autoridades para determinar las causas del accidente y deslindar responsabilidades.
La empresa aseguró que suma esfuerzos para la atención de las y los lesionados, en conjunto con la aseguradora. Y notificó que habilitaron una línea de atención telefónica para dar seguimiento puntual a cada caso.
La denuncia del joven se suma a otras que ha recogido EL UNIVERSAL, respecto a que era común que las unidades de esta línea de autobuses tuvieran fallas mecánicas, e incluso el autobús accidentado no quería ser manejado por los choferes dado que no contaba con frenos en buen estado.