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Foto: Archivo EL UNIVERSAL
Oaxaca de Juárez.— La bailarina y activista oaxaqueña Aleida Ruiz Sosa pidió apoyo para Rosario, una menor de edad que fue vendida a un hombre de la tercera edad, con quien contrajo nupcias cuando tenía 14 años. Hoy, la adolescente recibe atención médica en la capital del país, pues la casa donde vivía con su abuela y su hermana menor se incendió.
Aleida expone al respecto que Rosario fue víctima de las violaciones a todos sus derechos humanos.
La Secretaría de las Mujeres señala que Oaxaca es uno de los siete estados del país que prohíben el matrimonio infantil, por lo que se considera a la vanguardia en esa materia; no obstante y de acuerdo con datos del Inegi, los tres estados de la República Mexicana con mayor porcentaje de matrimonio infantil en México son Chiapas (44.82%), Guerrero (42.41%) y Oaxaca (39.17%).
En México, al menos una de cada cinco mujeres entra en unión conyugal antes de cumplir los 18 años de edad.
Rosario, además, presenció el feminicidio de su madre a manos de su padre. No contaba con acta de nacimiento hasta hace poco y su hermanita pequeña no ha tenido una vida muy diferente, lamenta Aleida.
El pasado 7 de febrero, el cuarto donde vivía Rosario junto con su abuela y su hermana, que estaba lleno de pet, cartón y otras cosas que recogían para sobrevivir, se incendió. La abuela de Rosario murió, mientras que ella se encuentra en coma por quemaduras de tercer grado en todo el cuerpo.
Rosario recibe atención médica en la capital del país; sin embargo, Aleida teme que sus familiares la hayan abandonado, pues no hay nadie que le dé información sobre el estado de la adolescente.
Ante ello, la activista exigió a las autoridades que se investigue y sancione a los responsables de las violencias que vive la adolescente, así como su hermana menor, Ana Gabriela.
Aleida continúa en la capital del país desde hace seis días, exigiendo atención para ambas menores. Ayer informó que arribó a la capital del país la representante de la Procuraduría de Protección a las Niñas y Niños de Oaxaca para brindar atención al caso.
La activista agradeció a las dependencias federales y estatales por brindar información sobre el caso e iniciar la atención a ambas niñas. No obstante, reiteró que hay mucho por hacer para garantizar la vida plena de ambas menores.
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