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El organismo encontró en los penales de Oaxaca deficiencia en la atención a los reclusos, por lo que algunos obtuvieron calificación de 5 y 4. Foto: SSPO
Oaxaca de Juárez.— La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reprobó las condiciones en las que se encuentran y operan los centros penitenciarios del estado de Oaxaca, en su informe más reciente sobre la situación de las cárceles del país.
Según el documento, denominado Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2021, el Centro de Reinserción Social No. 7 de Tehuantepec obtuvo una calificación de 5.37, el Centro de Reinserción Social No. 3 Miahuatlán obtuvo 5.6, el Centro de Reinserción Social Femenil Tanivet obtuvo 4.6, el Centro Penitenciario Villa de Etla 5.96, el Centro Penitenciario Varonil Tanivet 5.28, el Centro de Reinserción Social No. 10 Juquila 6.31, el Centro de Reinserción Social Especializado para Pacientes Psiquiátricos 5.59, el Centro de Reinserción Social No. 4 Cuicatlán 6.12 y el Centro de Reinserción Social No. 6 Tuxtepec obtuvo una calificación de 6.26.
En este diagnóstico la CNDH califica aspectos que garantizan la integridad de las personas privadas de la libertad, que garantizan una estancia digna, condiciones de gobernabilidad, reinserción social de las personas privadas de la libertad y grupos de personas privadas de la libertad con otras necesidades.
El organismo encontró en los penales de Oaxaca deficiencia en la atención a personas privadas de la libertad en condiciones de aislamiento y en los servicios de salud. También detectó hacinamiento, insuficiencia de vías para la remisión de quejas de probables violaciones a los derechos humanos y sobrepoblación.
Otras de las irregularidades detectadas fueron deficiencias en la alimentación, en las condiciones materiales y de higiene de instalaciones para alojar a las personas privadas de la libertad, así como inexistencia o deficientes condiciones materiales e higiene de instalaciones para la comunicación con el exterior, de la cocina y de los comedores.
Así como inexistencia o deficientes condiciones materiales e higiene del área médica y de instalaciones necesarias para el funcionamiento de los centros penitenciarios.
De la misma forma encontró que en los penales de Oaxaca existe el autogobierno o cogobierno en el que los presos ejercen funciones de autoridad, presencia de actividades ilícitas e insuficiencia de personal de seguridad y custodia.
A esto se suma la deficiente separación entre procesados y sentenciados, inadecuada clasificación de las personas privadas de la libertad, insuficiencia o inexistencia de actividades deportivas, insuficiencia o inexistencia de actividades laborales y de capacitación, deficiencia en la atención a personas adultas mayores y deficiencia en la atención a personas LGBTTTI, entre otras.