Tras casos de rabia en Oaxaca, expertos en murciélagos piden no agredirlos y no descartar a otros animales
Especialistas en mamíferos silvestres y zoonosis de México llamaron a la comunidad científica, gobernantes y pobladores a trabajar en conjunto para evitar acusaciones falsas sobre el contagio de enfermedades por murciélagos
Oaxaca de Juárez.– Especialistas en mamíferos silvestres y zoonosis de México llamaron a la comunidad científica, gobernantes y pobladores a trabajar en conjunto ante los casos de rabia en humanos detectados en la comunidad de Palo de Lima, en la región de la Sierra Sur de Oaxaca, pues consideraron que tras la muerte de uno de los pequeños, el asunto tiene implicaciones para la salud pública y veterinaria.
Mediante un documento público, los expertos llamaron a no satanizar a los murciélagos, dado que presuntamente un ejemplar fue el responsable del contagio, pues recordaron que contribuyen en la polinización de plantas, algunas de ellas de importancia alimentaria, pues dispersan semillas y permiten la expansión de bosques y selvas. También, dijeron, son controladores de insectos que transmiten enfermedades o que son plagas potenciales de cultivos como el algodón, cítricos y nogales.
“La conducta agresiva es poco frecuente en murciélagos con signos de rabia (…) La información científica disponible indica que la rabia en murciélagos tiende a provocar cuadros paralizantes y no agresivos”, resalta el documento.
Ven inconsistencias
Las y los especialistas explicaron que los murciélagos infectados con el virus de la rabia pueden mostrar conductas aberrantes como encontrarse activos durante el día o entrar incidentalmente en las casas. En estos últimos casos, las mordeduras suelen ocurrir cuando las personas toman a los murciélagos con las manos desnudas.
También, señalaron que en caso de tratarse de un murciélago hematófago (que se alimenta de sangre), es poco probable que un mismo individuo haya mordido (“atacado”) a varias personas la misma noche.
“Un murciélago hematófago solamente requiere 15-20 mililitros de sangre por noche (el equivalente a dos cucharaditas de té) para sobrevivir. Además, los murciélagos hematófagos generalmente buscan alimento de manera solitaria, por lo que un 'ataque' grupal es improbable”.
Y señalaron que solamente en situaciones extraordinarias varios individuos pueden coincidir en un mismo animal presa y estos casos, precisan, de acuerdo con los datos observados, han sucedido en vacas.
Los especialistas agregaron que la mordedura de un murciélago hematófago puede ser identificada a partir de su forma y tamaño (pequeño semicírculo de unos 3 mm. de largo), pero es poco probable que ésta pueda identificarse de manera confiable semanas después de haber sido realizada, ya que cicatrizaría en pocos días.
Apuntaron que no se ha informado que se hayan encontrado manchas de sangre la mañana posterior a la supuesta “agresión” del murciélago a los niños, pues los murciélagos hematófagos poseen en su saliva un anticoagulante natural que permite que ésta fluya mientras se alimentan. Al irse el murciélago, habría dejado un rastro de sangre visible en la cama de los menores.
Por otro lado, se reportó que los menores fueron mordidos en cara, brazos y en la parte inferior de la espalda, mientras que, según las los expertos, en humanos los lugares más susceptibles para una mordedura son las puntas de los dedos de manos y pies, los lóbulos de las orejas, la punta de la nariz y ocasionalmente los pezones, zonas altamente irrigadas que suelen mantenerse al descubierto y en las cuales los murciélagos hematófagos podrían tener acceso sin riesgo. “Por lo tanto, es improbable que la mayor parte del rostro o el dorso de los menores hubieran sido elegidos por un hematófago como lugar para morder”.
Piden no descartar a otros animales
Los especialistas agregar que aunque hay especies de murciélagos que utilizan construcciones humanas como refugios, los hematófagos y la mayoría de las especies evitan zonas iluminadas con actividad humana durante la noche, por lo que la probabilidad de que incursionen en áreas habitadas es muy baja.
Por ello, señalaron que "no se puede descartar que el virus haya sido transmitido a los niños a través de la mordedura de un murciélago. Sin embargo, además de que esto es poco probable, estos no son los únicos mamíferos silvestres capaces de transmitir la rabia, pues algunas pocas especies como zorros, zorrillos y mapaches pueden comportarse como portadores durante breves lapsos de tiempo”.
Además, agregaron que los animales de compañía, particularmente perros y gatos, pueden convertirse en transmisores al adquirir el virus por el contacto con mamíferos silvestres infectados. “Por ello, se hace énfasis en la importancia de la vacunación de los animales de compañía (incluyendo los no domiciliados) y de todo tipo de ganado. México fue declarado libre de rabia humana transmitida por perros desde hace tres años y en nuestras manos está que mantengamos este estatus”.
“Esta no es la primera ocasión en que los murciélagos son señalados de ser los responsables de la aparición de enfermedades sin que esto haya sido confirmado (como lo fue el Covid-19). Por esta razón, pedimos a la ciudadanía que sea cuidadosa al momento de compartir información a través de redes sociales y, enfáticamente, evitar tomar acciones precipitadas que incluyan la agresión a murciélagos o a sus refugios”, agregaron.
Ofrecen plan de acción y monitoreo
Recordaron que el seguimiento y atención de la rabia y otras enfermedades se realiza en México desde hace ya varias décadas y se cuenta con más especialistas que pueden coadyuvar a realizar diagnósticos adecuados. “Es por ello que en caso de confirmarse los casos de rabia, y se encuentre evidencia de que estos hayan sido provocados por murciélagos, ofrecemos a las autoridades locales nuestro apoyo para elaborar un plan de acción que incluya las siguientes faes:
a) Monitoreo de rabia en fauna silvestre.
b) Control poblacional de los reservorios quirópteros (que no implica necesariamente sacrificio de individuos).
c) Divulgación de información sobre los murciélagos entre habitantes locales.
d) Vacunación preventiva de animales domésticos susceptibles.
Medidas preventivas para la población
El gremio de científicos también enumeró una serie de accinoes que puede emprender la población como medidas preventivas, entre ellas destacan:
1.- Ser cuidadosos al encontrarse con fauna silvestre y siguiendo las indicaciones proporcionadas por especialistas en estos casos.
2.- Evitanr perturbar los sitios de descanso y no manipulando individuos de fauna silvestre.
3.- Acudir a revisión médica en caso de haber sido mordido por algún animal silvestre o doméstico del cual no se tenga certeza sobre su estado de salud.
4.- Reportar casos sospechosos de animales con síntomas de rabia en su localidad para que personal especializado realice las acciones necesarias para su diagnóstico, contención y prevención.
5.- Llaman a atender casos de rabia
Las y los expertos también hicieron un “llamado urgente” para que el personal de salud local atienda cualquier caso sospechoso de rabia desde el momento en el que se presenta una mordedura de un animal silvestre o doméstico. “No omitimos mencionar que la inmensa mayoría de animales silvestres nunca atacará, si no es molestado”.
También, pidieron a la población “mantener la calma y a evitar acciones que pongan en riesgo a las personas y a los murciélagos”.
“México cuenta con un nutrido grupo de especialistas en quirópteros (y otros mamíferos silvestres) que genera conocimiento científico y realiza actividades de difusión y divulgación para mejorar la comprensión de la relación entre murciélagos y humanos, y ponemos a la disposición de la nación y de cualquier interesado esta información y nuestra experiencia en el tema”, agregaron.
*El documento fue signado por la Asociación Mexicana de Mastozoología A.C. (AMMAC), Asociación Mexicana de Medicina de la Conservación, Kalaankab A.C., Kanan por la Vida Silvestre, Programa para la Conservación de los Murciélagos de México (PCMM), Red de Fauna Nativa en Ambientes Antropizados (REFAMA), Red Latinoamericana y del Caribe para la Conservación de los Murciélagos (RELCOM), Sociedad Mesoamericana para la Biología y la Conservación, Capítulo México (SMBC), así como más de 50 especialistas de diversas instituciones.