El próximo 25 de septiembre, los 45 diputados oaxaqueños votarán la despenalización de la interrupción del embarazo antes de las 12 semanas de gestación.

Se trata, nos comentan, de una  decisión que podría llevar a la 64 Legislatura a colarse con mayúsculas a los libros de texto. El detalle, nos cuentan desde los pasillos del Congreso, es que el cabildeo contra la iniciativa de ley está a todo lo que da, principalmente de parte de organizaciones religiosas que exigen que el tema se someta a consulta.

A sólo cinco días, organizaciones feministas e incluso Bernardo Rodríguez Alamilla, el ómbudsman oaxaqueño, han hecho un llamado a reconocer el derecho de las mujeres a decidir. ¿Los escucharán? 

El priista que cambió de bandera  

Y  nos dicen que precisamente tras la presión de grupos religiosos fue que el diputado priista Jorge Octavio Villacaña decidió cambiar de bando y luego de haber respaldado el primer dictamen a favor de  la iniciativa para despenalizar el aborto, optó por retirar su firma y declararse por completo en contra.

Como las redes sociales no perdonan, al legislador hasta lo acusaron de  tener un hijo no reconocido, pero él prefirió callar. ¡Ups!  

Alcanzados por la Marea Verde 

Otros personajes que también fueron alcanzados por el tema fueron Luis Ramírez, director del ISSSTE, y Ana Vásquez, titular de la Secretaría de la Mujer. Al primero, las activistas prodespenalización le reclamaron por prestar un auditorio para un evento dirigido a religiosos, mientras que a doña Ana la cuestionaron por decirse feminista, pero no pronunciarse al respecto.