"Convoco a la población de nuestro municipio a transitar por la ruta del diálogo y el acuerdo, dirimir diferencias en un ánimo de conciliación y permitir el desarrollo de nuestro pueblo de forma ordenada y pacífica", refirió.
Un día antes, pobladores de Loxicha instalaron una asamblea permanente para exigir al gobierno estatal que reconozca a las autoridades comunitarias, ante el desconocimiento de Jiménez Martínez en presidencia municipal, esto ante lo que describieron como "diversas irregularidades [en su elección], y vínculos con el PRI", en un municipio que se rige por Sistemas Normativos Indígenas.

Desde hace meses antes existía tensión de un conflicto político electoral ya que una parte de la comunidad desconocía el gobierno de Atenógenes Jiménez; la inconformidad incrementó ante el asesinato perpetrado hace una semana contra el activista, por el cual organizaciones y gente de este municipio le adjudican responsabilidad, pues han señalado que este crimen fue presuntamente ordenado por él.
Un día después del atentado contra Rodolfo Díaz, el entonces presidente municipal de San Baltazar Loxicha negó estar implicado en su asesinato, y responsabilizó al exdiputado local del Partido del Trabajo (PT), Flavio Sosa Villavicencio, de cualquier atentado contra su integridad física, tras las acusaciones que realizó en su contra.
En ese comunicado señaló estar dispuesto a colaborar en las investigaciones, informando que no tuvo ninguna responsabilidad en los hechos.
La Segego informó de su intervención en el problema político y social de Loxicha tras los hechos. Hasta el momento se desconoce quién ocupará el cargo en ese municipio de la Costa de Oaxaca.