Defensoría pide evitar medidas arbitrarias y discriminatorias en la lucha para contener al Covid-19
Bernardo Rodríguez Alamilla, ómbudsman de Oaxaca, pidió que las estrategias adoptadas respeten los derechos humanos bajo los principios de no discriminación, transparencia y respeto a la dignidad humana
Tras la escalada de restricciones tomadas por los gobiernos estatal y municipales para mitigar los contagios del coronavirus como parte de la Emergencia Sanitaria declarada en el país, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) solicitó que las medidas implementadas sean respetuosas de la dignidad humana y eviten ser espontáneas, arbitrarias o discriminatorias.
El órgano autónomo expresó tanto a los municipios como al gobierno de Oaxaca que las medidas tomadas ante la pandemia deben “tener sustento legal, ser objetivamente necesarias según evidencias científicas, con periodos de tiempo definidos (...) revisables, proporcionales y adecuadas a los fines que se persiguen”.
Bernardo Rodríguez Alamilla, ómbudsman de Oaxaca, pugnó porque las estrategias adoptadas por las diversas autoridades en la entidad respeten los derechos humanos bajo los principios de no discriminación, transparencia y respeto a la dignidad humana.
Recordó que, si bien la jurisprudencia internacional y tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, como la local, establecen que las personas tienen el derecho de disfrutar del derecho al más alto nivel posible de salud, éste no debe anular el acceso a otros derechos, y de hacerlo debe estar fundamentado en principios científicos y acompañado de estrategias para mitigar los efectos negativos.
Por ello, sostuvo que los gobiernos, además de establecer estrategias para prevenir las amenazas a la salud pública y brindar atención médica, éstas deben ser aquellas que indique la autoridad sanitaria.
“Cualquier acción que implique una restricción a derechos humanos tomada para dar respuesta al control del virus, debe estar motivada por objetivos legítimos de salud pública y no deben usarse para otros fines, además de que dichas limitaciones deben ser concretas, específicas y ser el último medio para proteger la salud pública”, resaltó el defensor.
Foto: Edwin Hernández
Así también, Rodríguez a Alamilla planteó que las acciones implementadas durante la Emergencia Sanitaria deben acompañarse de estrategias económicas y sociales que permitan la eficacia de las primeras.
Lo anterior, sostuvo, debido a que “todos los derechos humanos son interdependientes e indivisibles, todos interactúan con el derecho a la salud”.
Insistió que cualquier medida técnica de limitación de derechos derivada de la pandemia Covid-19 debe ir necesariamente acompañada de otro tipo de medidas sociales y económicas, de seguridad y asistencia social, y de prevención de la violencia doméstica.
“Reconocemos el riesgo inminente que actualmente define la vida pública de nuestro país en materia de salud, así como las facultades excepcionales que el derecho internacional de los derechos humanos permite a las naciones para hacer frente a la pandemia; sin embargo, tenemos que dejar claro que dicha respuesta no puede ser arbitraria y espontánea, ni restringir injustificadamente derechos humanos, siempre debe ser proporcional, estrictamente necesaria, adecuada a los fines y no discriminatoria”, señaló.
En distintos municipios de Oaxaca se han tomado decisiones drásticas ante la propagación del virus en la entidad, que ya tiene presencia en cuatro de las ocho regiones. Ejemplo de ello han sido la implementación del toque de queda y las restricciones de acceso en distintas comunidades.
Hasta hoy, en Oaxaca se contabilizan 22 casos positivos del padecimiento.