En Oaxaca, candidatos no están obligados por ley a presentar 3de3, ¿aceptarán este reto de transparencia?

Oaxaca de Juárez.—  “No es una varita mágica, pero puede significar un gran avance para el proceso democrático en el país”, sostiene Adán Córdova Trujillo sobre el proyecto que se impulsa conjuntamente con Transparencia Mexicana para que los aspirantes a un cargo de elección hagan pública su declaración 3de3 en este proceso electoral 2020-2021.

El expresidente en Oaxaca del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal de Combate a la Corrupción sostiene que esta iniciativa no sólo puede ayudar a  que la  ciudadanía tome mejores decisiones para elegir a sus representantes, sino también como un mecanismo de rendición de cuentas y para que  baje la percepción  sobre la corrupción, la impunidad y la poca credibilidad en las instituciones y los servidores públicos.

Córdova Trujillo es coordinador del Laboratorio Universitario de Estudios de Transparencia y Combate a la Corrupción de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), y fue designado por el Senado de la República como integrante de la Comisión de Selección del Sistema Nacional Anticorrupción.

El pasado 10 de enero dio a conocer el inicio de los trabajos  conjuntos entre la universidad y Transparencia Mexicana, para que los candidatos a diputaciones locales y  federales, y a las concejalías de los ayuntamientos hagan públicas sus declaraciones patrimoniales, de intereses y fiscal. 

La iniciativa 3de3 surgió a partir de la publicación del reportaje La Casa Blanca, entre otros trabajos de investigación periodística, sobre hechos de corrupción que involucraban propiedades y contratos gubernamentales. Transparencia Mexicana propuso que todos los candidatos a un cargo hicieran públicas esas tres declaraciones, “como medida anticorrupción y de blindaje electoral”.

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En la reforma constitucional de 2015, en materia de combate a la corrupción se convirtió en una obligación para los servidores públicos; sin embargo, su aplicación ha sido un proceso lento. 

Fue hasta  2017 cuando se aprobaron las leyes secundarias con las que se materializaban estas reformas, mientras que en las entidades  empezaron a aprobarlas entre 2017 y 2018; y los formatos para presentar estas tres declaraciones, en  2019.

Esto, no obstante, no es obligatorio para los aspirantes a un cargo de elección popular en la mayoría de los estados, a excepción de  Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Jalisco, Nayarit y San Luis Potosí, en los que, por ley, los candidatos deben presentarla. 

“Lo que nosotros estamos impulsando con Transparencia Mexicana es que los candidatos en Oaxaca lo hagan de manera proactiva, es decir, como una nueva herramienta para que los ciudadanos puedan ejercer mejor su derecho a votar, que conozcan mejor a quienes aspiran a representarlos a nivel federal y estatal, que podamos contrastar los hechos con los dichos de los candidatos”, expresa Córdova Trujillo.

Sin bien en Oaxaca no es una obligación de ley para los candidatos, sostiene, puede ser un muy buen paso para avanzar en la vida democrática de nuestro estado.

“La 3de3 no es una varita mágica, pero es un buen comienzo hacia un mejor gobierno, y hacer el cambio no sólo es voluntad de los ciudadanos, también se requiere de los cambios en los partidos políticos y en los aspirantes”.

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Pero el  especialista  puntualiza que no es una herramienta sólo para la toma de decisiones; insiste en que también es un mecanismo para mejorar el proceso democrático en el país y en Oaxaca, porque también sirve para la rendición de cuentas, la transparencia y abatir la impunidad en presuntos  hechos de corrupción.

Aquí, señala, es donde  se requiere un trabajo conjunto, porque si los ciudadanos exigen que se presente la 3de3, también corresponde a las instituciones encargadas de la fiscalización, revisión e investigación de hechos o de posibles hechos de corrupción, ocupar esta herramienta.

“En muchas de las ocasiones, cuando uno lee los resultados de la fiscalización de la cuenta pública, ve  muchos millones de pesos observados, y después resulta que con el paso del tiempo, no hubo ninguna sanción”, asegura. 

Asimismo, Córdova Trujillo subraya que este tipo de herramientas permiten que las instituciones hagan su trabajo, y con eso  la percepción de los ciudadanos cambie. “No sólo se trata de presentar las tres declaraciones, sino que también tenga una utilidad práctica”. 

No obstante,  advierte que tampoco es algo fácil porque requiere de inversión tecnológica, que los formatos  para presentar la 3de3 sean de fácil lectura y compresión,  interés de los ciudadanos y que las autoridades encargadas de la fiscalización y del fincamiento de responsabilidades ante hechos de corrupción, ocupen estas herramientas.