El 25 de septiembre de 2019, Oaxaca hizo historia al legalizar la interrupción del embarazo hasta las 12 semanas de gestación, convirtiéndose así en la segunda entidad del país en aprobar una legislación que garantiza a las mujeres el derecho a decidir sobre su cuerpo.

La ley fue aprobada en octubre de ese año, pero a la fecha, el derecho de las mujeres de la entidad a decidir sobre su cuerpo no está garantizado.
Pese a que la legislación respalda a las mujeres en la decisión de interrumpir un embarazo, de acuerdo con las activistas, no hay infraestructura de salud suficiente, y tampoco se ha capacitado a los médicos del sector salud en el tema.
Por ello, detallan, las mujeres oaxaqueñas que desean interrumpir legalmente sus embarazos se exponen a la clandestinidad, el rechazo y el señalamiento.